Nueva ayuda de Trump a Musk: no tendrá que informar de los accidentes de coches autónomos

Queda muy poco para que Donald Trump vuelva a asumir la presidencia de Estados Unidos, y comience su segundo mandato al frente del país americano. Poco a poco se van conociendo las nuevas caras al frente de su ejecutivo y, como ya había prometido, uno de ellos será Elon Musk. El propietario de Tesla llevará el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental.

Elon Musk, propietario de Tesla, y el hombre más rico del mundo, apoyó económicamente la campaña de Trump, aportando con 75 millones de dólares, como mínimo, aunque se dice que esa cantidad podría ascender hasta los 200 millones. Para un hombre que cuenta con 400.000 millones de fortuna, es una cantidad irrisoria.

Uno de los grandes objetivos de Musk es conseguir un coche con conducción autónoma completa. De momento algunos de sus modelos pueden conseguir conducir de manera autónoma, sin necesidad de uso del conductor, pero no es seguro del todo y los fabricantes no recomiendan usar únicamente el modo autónomo. Se producen muchos accidentes, y Tesla suele salir mal parada, al ser la marca que más se ha implicado en desarrollar esta tecnología.

Por ello, con la llegada de Donald Trump al gobierno, va a eliminar la obligación de hacer informes en los accidentes de coches con movilidad autónoma. Oficialmente, se ha dicho que se quiere evitar una recopilación de datos excesiva. Realmente, es una manera que se ha buscado Trump para ayudar a su amigo Musk, uno de los grandes partícipes de que haya vuelto a la Casa Blanca.

Suena extraño en Trump, que durante los cuatro años de su anterior mandato se mostró muy en contra tanto de los coches autónomos como de los eléctricos, abogando siempre por una vuelta a la combustión. Sorprende su nueva postura con los coches autónomos, a los que no quería ver ni en pintura.

De hecho, su lucha con los eléctricos continúa. Quiere eliminar los subsidios y ayudas a los coches eléctricos, del que sale beneficiado, aunque no lo parezca, Musk. El dueño de Tesla sufriría leves pérdidas con la eliminación de esta ayuda, pero el resto de la competencia tendría pérdidas mucho mayores. Tesla ya ha conseguido hacer un gran negocio en Europa, asociándose con fabricantes y evitando multas.

Aunque estas medidas favorezcan a Musk, no es su gran objetivo, ese por el que decidió subvencionar la campaña de Trump. SpaceX, la compañía aeroespacial del dueño de Tesla es el mayor propósito, y donde mayor rédito quiere sacar. Por ejemplo, el nuevo director de la NASA ya colaboró con Musk en el SpaceX.

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