Otra autopista levanta sus barreras y será gratis circular por uno de sus tramos con más tráfico

En diciembre de 2018, la AP-1 se convirtió en la primera autopista que levantó sus barreras: desde entonces son varias las que han seguido los mismos pasos, incluyendo las radiales de Madrid que se hicieron para aliviar el tráfico de entrada y salida a la capital de España. Una de ellas liberalizará uno de sus tramos más empleados para que los conductores de dos provincias se beneficien de su gratuidad.

Hablamos de la R-2, la autopista que fue inaugurada el 6 de octubre de 2003 y discurre a lo largo de 62 kilómetros entre la M-40 y Guadalajara. La semana pasada, en la Cadena SER, Emiliano García-Page (presidente de Castilla-la Mancha), confirmaba la noticia: cerrarán un acuerdo con el Ministerio de Fomento para liberar parte de la R-2. El coste de la decisión correrá a cargo del gobierno castellanomanchego y, aunque no hay fecha concreta, el dirigente apuntó a que la firma tendrá lugar a finales de enero.

Lo cierto es que, hasta ahora, la R-2 era, parcialmente, gratuita: desde las 0:00 y hasta las 6:00 se puede circular por ella sin tener que pagar. Es una de las medidas que el Ministerio puso en marcha para fomentar su uso. Estaba acompañada de rebajas en sus precios (en 2019 se bajaron, de media, un 30%) y de facilidades para los conductores que pagan el peaje con dispositivos electrónicos: descuentos del 18% (vehículos ligeros) y del 10% (pesados).

Se liberan 6,5 kilómetros

Como decíamos, las barreras no se levantarán en toda la vía: lo harán, únicamente, en el tramo que va desde el kilómetro 54, situado a la altura del Polígono Industrial del Henares (Marchamalo), hasta el kilómetro 60,5: un punto situado pasado el municipio de Taracena y antes de Valdenoches. Son, en total, 6,5 kilómetros que corresponden al último tramo de la R-2 antes de que conecte con la Autovía A2 en la provincia de Guadalajara.

La decisión del Gobierno de castilla-La Mancha es la respuesta a la petición que los usuarios mantienen desde hace años: esa zona de la R-2 acumula mucho tráfico (sobre todo de camiones) debido a la presencia de los polígonos industriales del Henares y de la nueva Ciudad del Transporte. La propuesta inicial pasaba por desdoblar la carretera, pero liberalizar los peajes ha sido la solución alternativa.

La R-2 pertenece al grupo de autopistas rescatadas por el Gobierno central. Su concesión era propiedad de Henarsa, una empresa integrada por Abertis, Acciona, Global Vía y Sacyr, que se declaró insolvente. Desde 2018, depende de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (SEITT).

Para esta autopista que conecta Madrid y Guadalajara había grandes objetivos que no se cumplieron: se esperaba que absorbiese el 30% del tráfico que discurre por el Corredor del Henares, unos 100.000 vehículos diarios… pero solamente transcurre el 25% de la circulación prevista y, además, no ha captado ni el 10% de la carga de la A-2.