Patinetes y bicicletas, en el punto de mira: el gobierno quiere que paguen seguro

El cambio en las preferencias de movilidad en las grandes ciudades es un hecho: cada vez se utiliza menos el vehículo privado, se apuesta más por el transporte público, por las soluciones de coche compartido y, también, por alternativas menos aparatosas como la bicicleta o los patinetes eléctricos, siendo éstos el objeto de moda en los últimos meses.

Su uso se ha multiplicado exponencialmente en las grandes ciudades: son compactos, no pesan mucho, tienen una autonomía razonable para el día a día y, además, son capaces de moverse con mucha agilidad allá por donde circulan. Sin embargo, la proliferación de bicis y patinetes eléctricos ha hecho que su uso tenga que regularse para mejorar la convivencia entre ellos, los coches y los peatones.

El ministerio del interior reformará de nuevo el código de circulación con la intención de recoger los nuevos vehículos que podemos ver por las ciudades, y plantea exigir seguros que cubran los accidentes que éstos puedan llegar a provocar, una iniciativa que también adelantó hace unos días el titular de Tráfico, Pere Navarro.

Teniendo en cuenta que son vehículos muy compactos que pueden alcanzar velocidades superiores a los 30 km/h, parece lícito plantear la exigencia de seguros de responsabilidad civil que puedan cubrir los gastos y las responsabilidades derivadas de situaciones anómalas a bordo de un patinete o una bicicleta eléctrica. Además, la regulación acerca de las posibilidades de circulación -prohibición, por ejemplo, de circular por la acera- se hace necesaria, un paso que ya han llevado a cabo ciudades como Madrid o Barcelona.