Peajes gratis: así debes circular por las autopistas que acaban de levantar sus barreras

El 1 de septiembre terminó la concesión de las autopistas AP-2, AP-7, C-32 y C-33: 550 kilómetros que han dejado de ser de pago para convertirse en gratuitos. Un cambio que animará a muchos conductores a decantarse por estas vías siguiendo, eso sí, unas normas concretas de circulación hasta que se lleve a cabo la desinstalación de los elementos de todos los peajes: ¿sabes cómo tienes que moverte por estas carreteras?

Informaba hace unos días el Ministerio de Transportes Movilidad y Agenda Urbana que esta liberalización beneficiará a unos 220.000 vehículos al día: el 83% de ellos son turismos y furgonetas y el resto, vehículos pesados. Dos serán los cambios con los que se encontrarán: un previsible aumento de tráfico y la “pertinente señalización y balizamiento en las zonas donde había barreras para que los usuarios reduzcan la velocidad al pasar por ellas”.

A 30 km/h

La conversión de estas vías rápidas de pago requiere una serie de obras y mientras éstas duren, los usuarios deberán respetar algunas normas de circulación provisionales: deberán circular a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora y tendrán que pasar, obligatoriamente, por las bocanas habituales del peaje que correspondan al carril por el que está discurriendo su marcha.

Para ello se procederá a adecuar la zona de las cabinas para que los conductores puedan circular con seguridad antes, eso sí, de desviar el tráfico temporalmente para rematar la adaptación. Unos trabajos que incluyen una completa señalización vertical de las obras, balizamiento, marcas viales, defensas provisionales y bandas transversales de alerta para lograr que los vehículos respeten el límite de velocidad establecido.

Finales de 2021 y principios de 2022

Y todo esto para dar paso al desmantelamiento de los peajes, que incluye la desinstalación, embalaje y el almacenamiento de todos los elementos que formaban parte del proceso de pago de las autopistas. Un lote que estará compuesto, previsiblemente, por las cabinas de peaje convencionales, las automáticas (VTP), las de pago dinámico (Vía T), las máquinas expendedoras de tickets, los paneles de mensajería variable, semáforos, detectores, barreras y pórticos. El resto será vendido como chatarra.

Tal y como informa La Vanguardia, en Cataluña estas operaciones tienen dos fechas marcadas que serían extensibles al resto de autopistas liberalizadas. Los peajes troncales deberían estar desmantelados antes de que acabe el presente año mientras que los secundarios se desmontarían a lo largo del primer semestre de 2022.