¿ADIÓS AL TUK-TUK CONVENCIONAL?
Podría cambiar una mítica foto para siempre: así es el nuevo tuk tuk eléctrico de Hyundai
Hyundai lanza tuk-tuks eléctricos con suspensión ajustable para calles inundadas. Dudas sobre autonomía, mantenimiento y diseño ponen en jaque su viabilidad.
Publicidad
¿Te imaginas las calles de Bangkok sin los clásicos tuk-tuks sorteando el tráfico a toda leche? Estos "chismes" son baratos, resistentes y, sobre todo, accesibles para millones de conductores que dependen de ellos para ganarse la vida. Pero Hyundai, en colaboración con TVS Motor Company, acaba de presentar un concepto que podría cambiarlo todo: el tuk-tuk eléctrico.
Se elevan para cruzar por calles inundadas
En la Bharat Mobility Global Expo 2025, Hyundai mostró dos conceptos revolucionarios: el E3W (triciclo eléctrico) y el E4W (versión de cuatro ruedas). Menos emisiones, más seguridad. Entre sus innovaciones más llamativas destaca una suspensión ajustable en altura, que permitiría circular por calles inundadas, una imagen habitual en la India durante los monzones.
Además, incorpora mejoras como parabrisas inclinado (con limpiaparabrisas, algo poco común en los modelos actuales), asientos plegables para facilitar el acceso a personas con movilidad reducida y neumáticos más grandes para cualquier pavimento.
Hablan de futuro, pero, ¿con presente?
Puede parecer que el tuk-tuk eléctrico llegue a ser un avance lógico. Sin embargo, le veo algún problema que otro. Para que este tipo de vehículos triunfen, deben ser asequibles, y eso está lejos de estar garantizado. Hoy en día, la mayoría de los rickshaws en India funcionan con gas natural comprimido, una opción mucho más barata que la electricidad en un país donde la infraestructura de carga sigue siendo únicamente, un pensamiento.
Además, los conductores suelen ser propietarios de sus tuk-tuks y trabajan con márgenes muy ajustados. Si estos nuevos modelos son demasiado caros, simplemente no podrán permitírselos. Y sin incentivos gubernamentales ni una infraestructura sólida para la carga, intuyo que la transición será difícil.
¿Solución o problema?
Otro punto que ha generado debate es el diseño del parabrisas. Defienden que la inclinación mejora la visibilidad, pero algunos conductores no están tan convencidos. Los rickshaws actuales tienen parabrisas verticales que ofrecen una visión panorámica, con cierta seguridad para los usuarios en caso de colisión. Un parabrisas inclinado podría generar reflejos con el sol, lo que no es ideal en un país donde las temperaturas pueden superar los 40 grados.
El otro gran interrogante es la autonomía y el tiempo de carga. En un sector donde cada minuto de trabajo cuenta, esto es un problema. ¿Baterías de quita y pon? ¿Cables de carga cada pocos metros? Esto tiene más pinta de problema que de otra cosa.
La realidad manda
No hay dudas de que el transporte urbano en países como la India necesita evolucionar. Un tuk-tuk eléctrico bien diseñado podría mejorar la calidad del aire y reducir el ruido en las ciudades. Sin embargo, para que esto funcione, debe adaptarse a las condiciones reales del país: electricidad confiable, precios competitivos y facilidad de mantenimiento, complicado al menos, de momento, ¿verdad?
Publicidad