Probamos el Mercedes-Benz EQA, una interesante opción para el segmento de los SUVs compactos 100% eléctricos

Hemos arrancando la 11ª temporada probando el EQA, un 'atleta' eléctrico, un coche dibujado para que la electricidad corra por sus baterías. Era la carta de presentación del Concept que daría origen al pequeño de los eléctricos de Mercedes. Ese primer proyecto de EQA se parecía más al Clase A.

Nuestro protagonista, finalmente, se quedó con el traje de SUV compacto, muy similar al Mercedes GLA, pero, también, llega con la intención de agitar el segmento eléctrico. Prometiendo una movilidad completa por ciudad solamente con una carga semanal.

Lo primero que nos llama la atención es su parrilla 'Black Panel', sin ventilación: no la necesita al ser eléctrico. También, llamativas son sus tiras de luces led y la línea azul, el color de la eficiencia, en la trasera y la otra línea que une a los pilotos. Un poco más abajo se encuentra el sensor que abre el maletero, de 340 litros,con el pie.

Una batería de iones litio de 66,5 kiloWatios-hora de capacidad, que se carga en 30 minutos del 10 al 80% en una carga rápida. La potencia depende de la versión: hay varias que van desde los 190 caballos a los 292.

Su velocidad máxima es de 160 kilómetros por hora, autolimitada, pero tenemos la posibilidad de regular la respuesta del acelerador, y hacer la conducción más económica o con más empuje, dependiendo del modo que elijamos: Eco, Comfort, Sport o Individual.

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Llega el electro-biodiésel, aún más eficiente que el biodiésel "tradicional"