SEGÚN UN ESTUDIO
¿Qué te distrae más: manipular la pantalla de tu coche o haber bebido alcohol?
Las distracciones están detrás de un tercio de los accidentes de tráfico que se registran en España… y la pantalla del coche es una fuente de despistes. Algo que ratifica un estudio que ha comparado cómo afecta su manejo al tiempo de reacción del conductor ante un imprevisto con el efecto que tiene el consumo de drogas y de alcohol: ¿qué distrae más?
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La Dirección General de Tráfico estima que un tercio de los accidentes de tráfico que tienen lugar en las carreteras españolas están causados por una distracción. Entre éstas, cada vez son más habituales los despistes tecnológicos provocados por los móviles y, también, por las pantallas de los coches. Tanto es así que un estudio los compara con el efecto que el alcohol tiene en la conducción.
La investigación lleva la firma de la consultora TRL, que, en su momento, la llevó a cabo en nombre de la asociación británica IAM RoadSmart, la FIA y la Fundación Rees Jeffreys Road. El punto de partida fueron tres pruebas que evaluaban el impacto de Apple CarPlay y Android Auto: en todas ellas, la ruta era la misma e iba cambiando la interacción con la pantalla.
En el primer recorrido no tuvieron que manipular la pantalla, en el segundo usaron los comandos de voz y en el tercero sí la manejaron con la mano. En los dos últimos casos hubo distracción, pero el control táctil fue el que más desvió su atención.
16 segundos sin mirar a la pantalla
La investigación de IAM RoadSmart comparó cómo afectan estos movimientos a los tiempos de reacción del conductor y cómo lo hace el consumo de alcohol y cannabis. A la hora de responder ante un imprevisto, manipular Android Auto en la pantalla ralentiza al conductor un 53% y Apple CarPlay, un 57%. Conducir después de ingerir alcohol por debajo del límite legal hace que esa reacción sea un 12% más lenta: el consumo de drogas, concretamente cannabis, lo hace en un 21%.
No es la única cifra que aportan para que los conductores sean conscientes del riesgo que implica manipular la pantalla del coche mientras conducen: también les cuesta más mantener la distancia de seguridad, controlar la posición del vehículo en el carril y circular a un ritmo constante. Aunque, eso sí, en el experimento muchos se dieron cuenta de la distracción y modificaron su comportamiento. Sin embargo, en ese paréntesis, retiraron la vista de la carretera durante 16 segundos: durante este tiempo, a 110 km/h, se recorren unos 500 metros.
Las pantallas no son la única fuente de distracción. Un conductor tarda, de media, un segundo en reaccionar ante un imprevisto: los que manejan el móvil de forma manual retrasan su reacción un 46%. Enviar o contestar a un mensaje de texto supone una ralentización del 35%, casi lo mismo que utilizar los comandos de voz con Apple CarPlay (36%). En el caso de Android Auto y de una llamada realizada con el manos libres, esa cifra es algo menor: 30% y 27%, respectivamente.
Una acción sancionada
La DGT recuerda que para manejar la pantalla del sistema de infoentretenimiento de tu coche, tienes que detenerte en un lugar seguro y proceder. Otra fórmula que, también, se puede emplear son las órdenes por voz. Si lo haces mientras estás conduciendo, te pueden sancionar por ello… de igual manera que si lo haces mientras estás detenido en un semáforo rojo o en un atasco.
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