Los SUV están cada vez más presentes en nuestras carreteras, ¿podría ser tu próximo coche?
Los SUV se han convertido en el tipo de vehículo de moda, por eso, es posible que tu futuro coche sea un SUV. ¿Por qué?
Las ventas de vehículos tipo SUV y crossover no paran de subir día tras día. Está claro que se han convertido en el tipo de vehículo de moda, y las previsiones dicen que esta tendencia seguirá en aumento en los próximos años. Te damos cuatro razones por las que tu futuro coche será, probablemente, un SUV.
1. Polivalencia
Si por algo se distinguen los SUV, o al menos así nos los quieren vender, es por su polivalencia. Y es que un SUV, por definición, "vale para todo" o para casi todo. Así es, por norma general son vehículo con un interior amplio que permiten realizar viajes con comodidad, cargando además grandes cantidades de equipaje. Por si fuera poco, su concepción les permite circular fuera del asfalto siendo, además perfectamente útiles para el día a día en la ciudad.
2. Imagen
El diseño es una de las principales razones de compra de un coche nuevo. Al fin y al cabo, la inversión tiene que merecer la pena y entrar por los ojos para que sea viable. Ahí es donde los SUV marcan la diferencia respecto a otros tipos de coche: su diseño robusto y marcado, con líneas fuertes, hace que sean vehículos por lo general muy atractivos a la vista.
3. Tecnología
El avance tecnológico al que estamos asistiendo en el mundo del automóvil es una realidad también en los SUV. Y es que estos vehículos cada vez están más cargados de tecnología, ofreciendo por ejemplo versiones microhíbridas capaces de ser etiquetadas con distintivo ECO por la DGT u ofreciendo, también, complejos sistemas de control de tracción que les permiten avanzar en campo sin necesidad siquiera de contar con tracción total.
4. Altura libre
La altura libre al suelo es, por sí misma, una ventaja cuando tratamos de avanzar fuera del asfalto, ya que no tendremos tantas posiblidades de impactar con un objeto del suelo. Sin embargo, esa altura es también una ventaja en el día a día: te permite mejorar la visibilidad, conducir con más confianza y mejorar la anticipación en caso de cualquier eventualidad en la carretera.