TRANSICIÓN FORZADA
Reino Unido pretende imponer a la fuerza el coche eléctrico con esta ley
El país británico pretende acelerar la transición al coche eléctrico con esta nueva ley. Un plan ambicioso pero drástico.
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Reino Unido tiene el mismo conflicto con la Unión Europea que con el coche eléctrico. Hace unos meses el país británico retrasó de 2030 a 2035 la prohibición de de vender vehículos nuevos con motorización diésel o gasolina. Ahora, los ingleses confirman la obligación a la marcas de vender como mínimo un 22% de coches eléctricos a partir de 2024.
De todos los países, es el primero que propone un plan tan drástico como ambicioso. Con esta normativa no servirán los microhíbridos para rebajar la media de emisiones. A partir del próximo año los fabricantes deberán ingeniárselas para que, como mínimo, uno de cada cinco coches que venda sea eléctrico.
En caso de que las empresas del mundo del automóvil no lograsen este objetivo, se expondrán a duras sanciones. Aunque estas multas aún no se hayan especificado, el pasado marzo, fecha en la que se presentó la propuesta de ley, se definió una cifra de 15.000 libras esterlinas por vehículo eléctrico que no se haya vendido.
Sin embargo, la intención del país inglés es ir aumentando de manera progresiva esa proporción con el paso de los años. De este modo, la proporción del 22% en 2024 aumentará progresivamente cada año hasta llegar al 100% en 2035. Concretamente, aumentará al 28% en 2025, al 33% en 2025, al 38% en 2027, al 52% en 2028, al 66% en 2029, al 80% en 2030 y, por último, al 100% en 2035, año en que se prohibirá incluso la venta de coches híbridos nuevos.
Existen una serie de excepciones. Las empresas que sobrepasen el porcentaje anual podrán mantener ese tanto por ciento de cara al objetivo del año siguiente. Otra opción es la de vender ese excedente a otro fabricante que no haya cumplido con el mínimo indispensable por ley.
Sin incentivos ni ayudas
La propuesta del gobierno británico será observada de manera detallada por la industria del automóvil y por el resto de países que han tomado la misma decisión que Reino Unido de prohibir la venta de vehículos nuevos con motores diésel o gasolina entre los años 2030 y 2035.
En 2022, la cuota de mercado de los coches eléctricos en el país angloparlante fue de un 16,6%. Unas ventas dominadas por Tesla, con sus Model Y (35.551 ventas) y Model 3 (19.701 ventas). El tercer modelo que aparece en este ranking es el Kia Niro, quien también superó la barrera de las 10.000 unidades comercializadas.
La propuesta es arriesgada. Desde junio de 2022, no existen ayudas para la compra del coche eléctrico en Reino Unido, lo que dificulta aún más la venta de este tipo de vehículo. Esto explica que la venta de particulares haya caído hasta un 8,1% en un mercado dominado de forma clara y contundente por las flotas de las empresas. Por lo tanto, pese al atractivo y potencial de la nueva normativa, habrá que ver cómo funciona sin ningún tipo de incentivo o ayuda.
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