Suzuki presenta la nueva imagen de su Swift R+

El Campeonato de España de Rallies comenzaba este fin de semana con cuatro marcas involucradas y con lo que se prevé que sea de nuevo una temporada en la que los R5 se repartirán las victorias y pelearán por el título Nacional a final de un calendario de 11 pruebas que cuenta con la introducción del Rally do Cocido como gran novedad. Tras la confirmación de su competitividad también sobre asfalto los N5 han cobrado gran relevancia en un campeonato que ha perdido a algunos de sus actores principales de los últimos años, entre ellos los hermanos Burgo y a Sergio y Diego Vallejo que se han centrado en el CERT.

Durante la semana previa a la prueba pontevedresa, Suzuki Ibérica, junto a sus patrocinadores principales, Repsol y la Oficina de Turismo de Ourense aprovechaban para presentar en la ciudad gallega el nuevo Suzuki Swift R+ 2018 con el que el equipo oficial dirigido por Juan López Frade competirá a partir del próximo Rally Sierra Morena en el resto de citas del Nacional de Asfalto 2018.

De nuevo sobre la base del Suzuki Swift, ARV Racing ha creado un vehículo de la categoría N5 que contará con un motor 1.6 turbo y una brida de 34 mm. El mayor cambio dentro del apartado del propulsor respecto a su antecesor vendrá marcado por la llegada de un nuevo turbo Garrett homologado que sustituye al que se venía utilizando hasta ahora y que ya se encuentra descatalogado. Con algo menos de 300 CV de potencia para un peso de 1.230 kilogramos.

Lo que sí ha cambiado completamente es el exterior del vehículo que utilizarán Joan Vinyes y Javier Pardo a partir de la carrera andaluza. Con la llegada del relevo generacional del Suzuki Swift de producción, la filial española de la marca ha creído conveniente la necesidad de renovar por completo la imagen del coche de competición, adaptándola en este caso al nuevo lenguaje de diseño de la marca y convirtiéndolo en su automóvil de carreras más representativo después de la jubilación del Suzuki Swift S1600.

Ahora el frontal es mucho más musculoso, más japonés, alejándose de la forma redondeada de su predecesor y con una mirada desafiante gracias a los nuevos grupos ópticos. Los pasos de rueda delanteros han extendido la carrocería para dar cabida a las ruedas de competición y los ejes que utilizan los N5, también amoldando las entradas de aire del frontal para llevar más aire a un propulsor que se mantiene lo más de serie posible. También, el alerón trasero se ha reajustado, adoptando unas nuevas sujeciones que sustituyen a las que venía utilizando el Swift R+ prácticamente heredadas de la versión S1600. Aquí el preparador gallego partía de una hoja en blanco para el diseño de esta nueva imagen y el resultado es espectacular.