URBANO Y AVENTURERO A LA VEZ
Es tan barato como un MG ZS, pero es un SUV que presume de motor de 135 CV perfecto para escapadas
El KGM Tívoli tiene las características para triunfar en España, como han demostrado otros modelos. Es asequible, despliega un amplio maletero y suma sistemas de asistencia a la conducción
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El MG ZS fue el tercer coche más vendido en enero en España con 2.103 unidades, y las cifras de febrero deberían ir por el mismo camino. Es un síntoma que invita a la esperanza a uno de sus máximos competidores, el KGM Tívoli, que es igual de eficiente, barato y con tanto equipamiento como el modelo de MG.
El KGM Tívoli se vende desde 15.400 euros, un coste muy difícil de encontrar hoy (al margen del ZS) en el mercado para un coche tan completo, empezando por su motorización. Es de gasolina de 1.5 litros y cuatro cilindros. Se vincula a una caja de cambios manual o automática de seis velocidades y su tracción es delantera.
Esta motorización se ofrece con potencia de 135 CV que consume 7 litros cada 100 kilómetros, algo por encima de la media del mercado, o de 163 CV. Sin embargo, el comprador puede pedir su coche adaptado para incluir una motorización de Gas Licuado del Petróleo (GLP).
Capacidad de carga
En el caso de la motorización de gasolina, la Dirección General de Tráfico lo califica con Etiqueta C, por lo sufre severas limitaciones en las Zonas de Bajas Emisiones que se extienden por las ciudades españolas. En cuanto a la circulación puede estar limitado, pero no respecto a la capacidad de carga porque su maletero es de 427 litros, 1.115 litros con los asientos traseros plegados.
Aunque tiene un espíritu de coche tradicional de gasolina, dando prioridad al espacio y a una motorización práctica y fiable, el KGM Tívoli no desdeña la inclusión de tecnología como su sistema de infoentretenimiento con pantalla multimedia táctil de 8 pulgadas que se conecta a los dispositivos móviles de manera inalámbrica.
Asistencia a la conducción
El KGM Tívoli tampoco renuncia a los sistemas avanzados de asistencia a la conducción, entre los que se encuentran el control de crucero, control electrónico de tracción, encendido diurno automático, control de arranque en pendiente, encendido automático de luces de emergencia, sistema de alarma de colisión, alerta de cambio de carril o reconocimiento de señales de tráfico.
Por si fuera poco, cuenta con protección antirrobo para que el propietario pueda estar tranquilo cuando aparca el KGM Tívoli en la calle. Con tanto equipamiento y tecnología, esos 15.400 euros que cuesta se quedan muy cortos. Y esa es su mejor virtud, la relación calidad/precio.
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