El truco del 'coche comodín' en la ITV que sirve para hacer trampas en las pruebas

Todos los coches tienen que pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y lógicamente los plazos son más amplios en sus primeros años de vida, y más cortos conforme pasa el tiempo. Lo ideal es recibir un favorable, la pegatina correspondiente hasta la próxima revisión y seguir con nuestra vida.

Sin embargo, hay otras dos opciones: desfavorable (puedes llevarte tú mismo el coche y reparar los desperfectos en el plazo máximo de un mes) o negativa (el vehículo se queda inmovilizado en la estación de ITV y solo te lo puedes llevar en grúa). En estos casos dos últimos casos es donde entra en juego el famoso coche comodín.

¿Qué es el truco del coche comodín?

El coche comodín es una técnica fraudulenta que algunos utilizan para obtener un resultado favorable en la ITV sin que el coche esté en esas condiciones. ¿Y en qué consiste? Se utiliza un vehículo que está en perfectas condiciones para pasar las pruebas en lugar del coche que realmente tiene que pasarlas.

Así, pasa perfectamente las pruebas de frenado y emisiones, aunque el vehículo original no cumpla con esos estándares. Evidentemente, para llevar a término el truco del coche comodín tiene que existir un acuerdo con la propia estación de ITV o, al menos, con algunos empleados.

Después de obtener resultados favorables (con el coche comodín), es el vehículo que no ha sido inspeccionado el que recibe toda la documentación correspondiente y la pegatina de la ITV. Por tanto, vuelve a ponerse en circulación sin haber superado los controles correspondientes.

Este es uno de los casos más sonados

No es un truco nuevo ni mucho menos, pero sí que hay casos que han sonado más que otros. Hace dos años, la Guardia Civil puso en marcha la Operación Frenómetros que terminó con la detención de 17 empleados de una estación de ITV en Murcia. Utilizaban un Renault Clio de color rojo en calidad de comodín, y era el que pasaba las pruebas de aquellos vehículos que primero obtuvieron un resultado desfavorable.

Esa estación de ITV borró más de 60.000 archivos informáticos unos días antes del registro que llevó a cabo de la Guardia Civil, y en ellos detectaron más de 1.000 delitos de falsedad documental. Y en todas las situaciones se repetía el patrón: un primer resultado desfavorable y un segundo favorable, el mismo día y con apenas unas horas de diferencia.

¿Qué consecuencias tiene?

Más allá de todas las implicaciones legales de utilizar el truco del coche comodín, lo primero que hay que tener en cuenta es que compromete la seguridad del conductor, sus pasajeros y el resto de vehículos de la vía. Al no cumplir con los estándares para recibir un apto por parte de la ITV, se multiplica el riesgo de sufrir averías y tener un accidente.

En caso de siniestro, las aseguradoras están en su derecho de no cubrir los daños si se confirma que el vehículo ha pasado la ITV de manera fraudulenta. Y lógicamente, esto también tiene consecuencias económicas y legales para el propietario.

Las estaciones de Inspección Técnica de Vehículos y sus empleados también se llevan lo suyo por una práctica que pone en riesgo la seguridad. Y aunque sabemos el fastidio que supone una ITV desfavorable o negativa, es mucho peor pagar las consecuencias después.

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