Tus lentes de contacto tienen la clave para revolucionar el coche eléctrico

Aunque parezca mentira, ya lo predijo en 2011 el fundador de , Elon Musk: apostó entonces que los supercondensadores sustituirían a las baterías, momento que supondría un avance para los coches eléctricos. Y el tiempo parece que le va dar la razón a Musk... Investigadores de la Universidad de Surrey, Inglaterra, han desarrollado un polímero que puede aumentar drásticamente el rendimiento de los supercondensadores, componentes electrónicos que son capaces de almacenar y suministrar grandes cantidades de energía. Este avance que puede revolucionar el coche eléctrico deriva, ni más ni menos, que de un plástico basado en el que se emplea en las lentes de contacto. Esta tecnología tiene en su mano poder resolver algunos de los mayores retos a los que se enfrentan los vehículos eléctricos actualmente: la velocidad de carga y la autonomía. Con este nuevo polímero, los investigadores aseguran que se podría  recargar un coche en pocos segundos y viajar de Londres a Edimburgo (666 Km) sin necesidad de recargar.

Los supercondensadores actuales tienen una densidad energética de 5 W/hora por kilo, en comparación con los 100 vatios-hora de las baterías de iones de litio que montan la mayoría de vehículos eléctricos. El equivalente en un coche propulsado por gasolina es de 2.500 W/h y kilogramo. Es evidente que la densidad energética a la hora de almacenar energía eléctrica es uno de los retos tecnológicos de la actualidad. Ahora esta investigación ha demostrado que, usando este polímero derivado de las lentes de contacto como material electrolito, la densidad energética de los supercapacitores podría aumentar entre 1.000 y 10.000 veces. Además de recargas mucho más rápidas, esto se traduce además en un abanico más amplio de aplicaciones de la propulsión eléctrica, pudiendo abarcar vehículos pesados como autobuses y camiones en los que la demanda de energía es mayor que en un turismo. En Centímetros Cúbicos: |