Ultimátum en 2025: el accesorio que la DGT hará obligatorio a partir del 1 de enero del próximo año

Vas circulando con tu vehículo y tienes un accidente o detectas una avería. Durante toda la vida, lo habitual ha sido ponernos el chaleco reflectante y colocar los triángulos a unos 50 metros de distancia de la parte trasera del vehículo. Sin embargo, en 2023 la Dirección General de Tráfico dio marcha atrás a una norma que llevaba vigente desde 1999 y eliminó la obligatoriedad de utilizarlos, con algunas excepciones.

Durante este tiempo, la DGT nos ha concienciado sobre el uso de los dispositivos de preseñalización V16, que serán obligatorios a partir del 1 de enero de 2026.

¿Qué es el dispositivo de preseñalización V16?

El dispositivo V16 es una pequeña baliza luminosa de color amarillo que debe colocarse en el techo de un vehículo en caso de avería o accidente. Emite una luz intermitente y de alta intensidad que garantiza una visión 360 grados del coche que está detenido, lo que tiene ventajas para el resto de conductores de la vía y para los propios ocupantes del vehículo.

Funciona con una pila o una batería, dependiendo del modelo, y debe tener una vida útil de al menos 18 meses. Por supuesto, no debes llevarla en el maletero, como ocurre con los triángulos, sino en la guantera para que puedas avisar al resto de conductores en caso de accidente sin necesidad de bajarte del coche.

El V16 —que será el único dispositivo legal para señalizar un peligro a partir del 1 de enero de 2026— también se conecta a la plataforma DGT 3.0 y transmite la ubicación en tiempo real para avisar a otros conductores.

Homologación y dónde adquirir una luz V16

El V16 no será obligatorio hasta dentro de un año, aunque la DGT aconseja a los conductores anticiparse a esta fecha y familiarizarse con el dispositivo. Durante este periodo de transición, se podrán seguir utilizando triángulos de emergencia y luces V16 con y sin conexión, porque actualmente conviven ambos modelos.

Sin embargo, a partir de 2026 será obligatorio que todos llevemos en la guantera una luz V16 con conectividad, porque es lo que permite a la DGT alertar al resto de conductores que hay un vehículo accidentado. Por tanto, si lo vas a comprar durante 2025, lo mejor es que inviertas en un dispositivo con conexión y homologado, pues serán los únicos válidos a partir del 1 de enero del próximo año.

Y no, no tendrás que pagar ningún coste adicional por la conectividad, porque los dispositivos homologados la incluyen. Es más, la ley establece que el periodo de conectividad mínima debe ser de 12 años y debe ir incluido en el precio del V16, así que solo tendrás que prestar atención a la fecha de vencimiento.

Ventajas frente a los triángulos de toda la vida

La principal ventaja de estos dispositivos (y el motivo por el que la DGT los hará obligatorios) es que mejoran la seguridad. Ya no tendremos que bajarnos del coche para colocar los triángulos ni exponernos al tráfico, sino que bastará con sacar la mano por la ventanilla y colocarlo en la parte más alta del vehículo.

Si por su naturaleza no es posible acceder al techo del vehículo, el V16 debe tener un imán para que se mantenga estable en la puerta del conductor.

Al ser visible a 1 kilómetro de distancia, es mucho más fácil identificar un peligro, sobre todo en condiciones de baja visibilidad, lluvia o niebla. Y como este dispositivo tendrá conexión directa con la DGT, cualquiera podrá recibir un aviso a través de las principales apps de navegación, de los paneles de información de la carretera o del propio ordenador de a bordo del vehículo.

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