McLaren 765LT Spider o cómo hacer historia siendo descapotable más potente de tu marca

¿Qué puedes hacer cuando las 765 unidades del McLaren 765LT ya han sido vendidas? Redoblar la apuesta y escribir un nuevo capítulo en la historia de Woking. ¿Cómo? Ampliando la familia Longtail con un nuevo lanzamiento: el McLaren 765LT Spider, es decir, el descapotable más potente de la marca británica.

La principal diferencia salta a la vista: su capota rígida retráctil de fibra de carbono. Se abre en once segundos, una operación que puede llevar a cabo a velocidades de hasta 50 km/h. Su presencia suponía todo un reto para controlar el peso que, finalmente, se queda en 1.388 kilos: unos 49 más que el coupé.

Algo que han logrado desprendiéndose de todo aquello que no consideran necesario: moqueta interior, aire acondicionado, audio (estos dos sistemas se pueden instalar de nuevo sin coste adicional)… Además, las puertas son más pequeñas y ligeras, los cristales son más finos, las llantas son ultraligeras, el escape es de titanio, etc.

Cambios en la aerodinámica

McLaren destaca que el 765LT Spider no cuenta con refuerzos adicionales para mejorar su resistencia y la rigidez de su estructura. En la zaga, por ejemplo, han integrado los soportes estructurales de fibra de carbono para proteger el coche ante un vuelvo. Aunque no esto lo que más llama la atención, sino las cuatro salidas de escape… que podemos escuchar gracias a que la luneta trasera tiene un motor para poder bajarla cuando la capota está puesta.

En la parte aerodinámica las diferencias residen en el alerón trasero activo, que ahora tendrá en cuenta si la capota está puesta o no, y en el recalibrado los amortiguadores en función del peso. El habitáculo, al que se accede a través de sus puertas con apertura vertical, mantiene su prioridad: la conducción y para ello todo gira en torno al conductor.

El mismo motor

Donde no hay cambios es en el corazón del McLaren 765LT Spider. Los británicos han apostado por el motor M840T con el que ya equiparon al coupé: un V8 de 4.0 litros con cigüeñal plano, lubricación por cárter seco, turbocompresores de doble entrada de muy baja inercia y válvulas de descarga controladas electrónicamente. Un bloque que, al mismo tiempo, cuenta con pistones de aluminio forjado, la junta de culata de tres capas del McLaren Senna y seguidores del tren de válvulas ultraeficientes recubiertos de carbono.

Las cifras que devuelve son las mismas que las del McLaren 765LT: acelera de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos y de 0 a 200 km/h en 7,2 segundos. Algo que consigue gracias a una potencia de 765 CV a 7.500 rpm y a un par motor de 800 Nm a 5.500 rpm, que están controlados por un sistema de gestión con una calibración hecha a medida. Lo que sí estrena la versión descapotable es una puesta a punto específica de las suspensiones, mayor anchura de vía delantera o unos neumáticos Pirelli Trofeo R desarrollados para este modelo y que van montados en unas llantas forjadas con diseño de diez radios.

Edición limitada

Como habréis podido imaginar, el McLaren 765LT Spider está limitado a 765 unidades que ya admiten pedidos en los concesionarios de la marca. Eso sí, igual que la versión coupé, se trata de un modelo limitado a bolsillos abultados: cada una de ellas tiene un precio de 425.000 euros, 40.000 más que el 765LT.