Probamos el nuevo BMW M2, la combinación perfecta entre deportividad y precisión alemana

Cuando hablamos del nuevo BMW M2, nos vienen a la mente atributos como atlético, personalidad e intensidad. Esta nueva versión del coupé de dos puertas continúa la estirpe de los modelos compactos y a la vez ultradeportivos, que comenzó con el 2002 Turbo en los años 70. Desde entonces, hemos visto modelos icónicos como el M3 E30 o el 1M, que han sido fundamentales para los modelos actuales.

Desde su llegada al mercado, el M2 ha sido un ejemplo perfecto de la unión entre rendimiento y diseño. Bajo su capó, cuenta con un motor de seis cilindros que alcanza los 460 CV, 90 más que la versión anterior, listo para quemar el asfalto. Esta potencia se complementa con su estética: una gran parrilla sin marco con los icónicos riñones de BMW, una toma de aire inferior dividida en tres secciones, faldones laterales ensanchados, un alerón integrado en la tapa del maletero y una cuádruple salida de escape.

Los afortunados que adquieran esta versión podrán optar por un acabado en Toronto Red metalizado, al que se puede añadir un techo de fibra de carbono M que, además de embellecer el vehículo, reduce el peso total en seis kilogramos. La experiencia de conducción es excepcional y se intensifica con la configuración de propulsión trasera y un sistema de escape M con válvulas controladas electrónicamente, lo que da como resultado un mejor rendimiento y un sonido robusto.

La dinámica del vehículo es notable, ofreciendo múltiples opciones de ajuste que van desde la suspensión adaptativa M hasta la dirección M Servotronic con asistencia variable, un sistema de Control Dinámico de Estabilidad y potentes frenos M Compound. Todo esto lo convierte en una máquina perfecta para volar por el asfalto. En cuanto al interior, se caracteriza por la búsqueda el disfrute del conductor, desde los asientos tipo baquet de fibra de carbono hasta una pantalla central de 12,3 pulgadas.

Para los amantes de la velocidad, BMW ofrece el paquete M Race Track, que incluye mejoras adicionales para una increíble experiencia en circuitos. Este paquete se suma al M Driver, al techo de carbono M, las molduras interiores en acabado de fibra de carbono y los neumáticos deportivos.

Aunque este deportivo se caracteriza por su velocidad, no deja de lado la seguridad. Esta nueva versión del M2 está equipada con una gama completa de los mejores asistentes a la conducción, garantizando la máxima seguridad posible y permitiendo una conducción deportiva segura. Este conjunto hace del BMW un vehículo que se caracteriza por la sofisticación, entrega y deportividad.