El Seat León entra en la zona ECO, esta vez gracias a la microhibridación

Es Seat León, un coche con casi 25 años de historia y millones de unidades vendidas durante cuatro generaciones se sigue resistiendo a la moda, y mantiene su éxito gracias a la fórmula de unir diseño, tecnología y motores para todos los gustos.

En este 2024, el Seat León se pone al día para hacerse un hueco en un sector cada vez más competitivo y en el que prima la eficiencia. Por eso crece en carga tecnológica y suma a sus motores una interesante y eficiente tecnología microhíbrida.

Las dos versiones, cinco puertas y familiar Sportstourer, destacan por los grupos ópticos horizontales y unidos en la trasera, y los alargados faros en el frontal que, además, son novedad. Estrena faros Matrix LED, muy útiles cuando se conduce de noche, porque amplían el campo de visibilidad a lo largo y a lo ancho de la carretera, a la vez que se adaptan al tráfico que viene en sentido contrario, para no molestar.

En el interior, altamente digital y orientado al confort, también hay novedades. Detrás del volante se encuentra el Digital Cockpit, de 10,25 pulgadas, y la pantalla central donde se proyecta el sistema de infoentretenimiento, que ahora es más grande.

Pasa de 8,25 pulgadas a 10,40, un tamaño que facilita la interacción con el coche; también por sus nuevos comandos retroiluminados táctiles de fácil acceso, y evita distracciones al no tener que apartar demasiado tiempo la vista de la carretera.

La vista siempre en la carretera y el móvil conectado al coche, para no tener tentación de cogerlo. Además, el Léon ofrece ahora carga inalámbrica rápida y con tecnología de refrigeración.

Una de sus cartas es que hay un León para cada conductor. Gasolina, diésel, híbrido enchufable o un microhíbrido como éste. Tiene siete opciones a elegir con potencias que van desde los 115 hasta los 204 caballos.

Los motores que mueven al León son propulsores de cuatro cilindros: el 1.5 TSI para las versiones gasolina, microhíbridas e híbrido enchufable; y el 2.0 TDI para la opción diésel.

Hoy tenemos entre manos el nuevo motor de acceso a la gama “electrificada” del León, el eTSI ó microhíbrido. Se trata de un motor de gasolina 1.5 TSI de 115 CV que sustituye al anterior 1.0 TSI de 110, con apoyo eléctrico de 48 Voltios y un cambio automático DSG de siete velocidades.

Con la microhibridación hay bastantes ventajas. Lo primero, la etiqueta ECO. Y ya en marcha, sube la cifra de par, algo en lo que también interviene el aumento de la cilindrada. Y todo esto se traduce en una respuesta más enérgica, suave y eficiente. Porque contener su consumo en unos muy interesantes 5 litros a los 100 km es posible.

Es compacto, pero eso no quiere decir que no sea seguro, sino todo lo contario. El León cuenta con cinco estrellas, la máxima puntuación, en las pruebas de seguridad Euro NCAP. Los sistemas de ayuda a la conducción que lleva te cubren la espalda, bueno te pueden salvar de la cabeza a los pies. Desde que sales de un aparcamiento hasta que llegas a casa. En los coches de nueva fabricación son obligatorios y son muy importantes a la hora de evitar accidentes.

Que el Seat León tiene aptitudes, y actitud, para seguir en primera línea durante unos cuantos años más es indiscutible. No hay duda de que esta nueva mecánica le sienta de maravilla: por ciudad se desenvuelve muy bien y, en carretera gasta poco y tienes potencia de sobra. Y todo esto bajo una carrocería compacta con unas líneas muy atractiva, un habitáculo conectado y mucho espacio para pasajeros, ¡y equipaje! Porque con un maletero de 380 litros no tendrás que hacer ningún tetris. ¡Vaya si ha madurado bien el León!