Nos ponemos al volante del Bentley Continental GT con motor W12 de 635 CV
Bentley Continental GT 2019, a prueba: el mejor GT que podía fabricar Bentley
El Bentley Continental GT 2019 ya está en el mercado y hoy analizamos la última renovación del GT por excelencia
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El Bentley Continental GT ha recibido en su última generación la que posiblemente sea su mayor y más importante actualización. Con el lanzamiento de esta tercera generación Bentley apostó por reinventar su modelo estrella, su buque insignia, y para ello decidió emplear lo mejor del Grupo Volkswagen en tanto a plataforma, tecnología o sistema de propulsión. Así, el Bentley Continental GT no solo es un referente para la Bentley actual, sino que además se convierte en un escaparate tecnológico para todo el grupo automovilístico.
Para esta nueva renovación del Bentley Continental GT la firma de Crewe decidió introducir una reinterpretación de su diseño, algo nada sencillo ya que se buscaba ofrecer una profunda revisión, pero al mismo tiempo se pretendía mantener intacta la filosofía del modelo. De este modo nos encontramos un coche que se mantiene fiel a su raíces en materia de diseño, haciendo uso de grandes volúmenes, trazados muy marcados y unas proporciones cuanto menos considerables. Pero el resultado no podría haber sido mejor, el Bentley Continental GT gana enteros en cada vista, ofreciendo no solo un aspecto más deportivo y elegante, sino manteniendo su filosofía con una estética mucho más estilizada y actual.
De puertas hacia dentro es donde el Bentley Continental GT más cambia, ofreciendo un salto nunca antes visto en la marca que perfectamente podría pasar por un cambio de varias generaciones. Bentley ha sabido combinar de nuevo las pinceladas de diseño y gusto clásico con la última tecnología, algo que queda patente en cada milímetro del habitáculo con un altísimo grado de calidad en materiales y ajustes, un diseño deportivo y exclusivo en la práctica totalidad de sus mandos y mucha tecnología. El nuevo Continental GT ofrece ahora un abrumador despliegue tecnológico, y no solo hablamos de su cuadro de instrumentos digital con 12,3", sino del nuevo sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil giratoria y 12,3" de diagonal.
Desde esta interfaz podemos gobernar todas las funciones del vehículo, ofreciendo no solo un nivel muy alto de configuración y personalización, sino un sinfín de posibilidades en sus respectivas aplicaciones como navegación, multimedia, servicios conectados o confort. Y lo mejor de todo es que Bentley ha pensado en todos sus clientes, ofreciendo para ellos la posibilidad de ocultar esta interfaz por completo y mostrar una configuración más clásica con relojes analógicos.
Con solo pulsar un botón esta interfaz desaparece, dejando en los mandos físicos de su enorme consola central el control de las funciones más importantes del vehículo. Este gadget tiene además su razón de ser, pues el peculiar sistema giratorio de la pantalla central es un guiño al gadget de matrículas intercambiables visto en las novelas de James Bond, pues no hay que olvidar que fue un Bentley Blower el primer coche conducido por el agente 007.
Y llegó el momento de ponernos en marcha. Haciendo uso del mando giratorio situado en la consola central, el motor 6.0 W12 Twin-Turbo de 635 CV despierta con una mezcla de soberbia y gran suavidad. Los cambios ya vistos en carrocería e interior no pueden ser menos a nivel técnico, encontrando así un Bentley Continental GT que ofrece una verdadera revolución en el apartado dinámico. Pese a conservar ese espíritu de Gran Turismo típico en este modelo, la ganancia en deportividad es evidente desde el primer momento en que tu acomodas en el puesto de conducción. Pocas marcas como Bentley saben mezclar tan bien deportividad y lujo y para esta nueva generación del Continental GT han querido sacar la mejor visión de esa difícil receta.
Para empezar el nuevo Bentley Continental GT estrena una nueva plataforma que es compartida con el Porsche Panamera, algo que ya nos adelanta la ganancia en puesta a punto que se avecina. De este modo pese a conservar la clásica arquitectura para el propulsor, un W12 doblemente sobrealimentado, se ha empleado un cambio automático de doble embrague y 8 relaciones, además de un sistema de tracción total inteligente que prioriza el envío de par a las ruedas traseras. A ello también debemos añadir el uso de una suspensión neumática de última generación que es combinada con el uso de estabilizadoras activas, dando como resultado un comportamiento muy superior a sus anteriores generaciones, especialmente en el paso por curva donde el nuevo compendio técnico nos hacen olvidar el peso y tamaño de este coupé de cuatro plazas. El aplomo en los giros y la contundencia para ganar ritmo es realmente impresionante.
El nuevo Bentley Continental GT ofrece una ganancia notable en efectividad, agilidad y diversión, sintiéndose como un coche mucho más completo, aunque sin olvidar el confort y suavidad que caracteriza al modelo. El trabajo de puesta a punto se percibe como sumamente complejo para combinar ambos apartados, pero el resultado es excepcional y el concepto de Gran Turismo se mejora justo en los puntos clave donde sus anteriores generaciones más flaqueaban. Puestos a pedir nos habría gustado encontrar una dirección todavía más directa, pero los planes de Bentley están claros y de cara a ofrecer un coche todavía más deportivo tocará esperar a las versiones Speed y Supersports.
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