Uno de los modelos más potentes de la marca
Esta semana, en Centímetros Cúbicos, probamos el 3008 PHEV, una de las muestras del nuevo lenguaje de diseño de la marca del león.
En los últimos años, Peugeot, además de reinventar por completo su lenguaje de diseño, se ha lanzado a cumplir con el reto medioambiental de reducir las emisiones al máximo. Y lo está haciendo a través de variantes 100% eléctricas de algunos de sus modelos y también de versiones híbridas enchufables, como el 3008 PHEV.
El 3008 se trata de un coche que guarda muchas similitudes con el 5008, pero también con pequeñas diferencias. Sutiles, pero lo suficientemente importantes como para que denoten que estamos ante una variante electrificada.
Para este 3008 PHEV contamos con dos versiones, la de 255 caballos y la de 300 caballos. La que nos ocupa es esta última, que además cuenta con tracción a las cuatro ruedas. Estos 300 caballos son todo un récord para un Peugeot de gran serie, solo superados por los 360 del 508 Engineered Sport.
Desde un principio, el 3008 se diseñó como un coche cómodo y agradable de conducir. La postura de conducción, gracias al volante, más bajo de lo normal y con el cuadro de instrumentos por encima, es más relajada que en otros coches.
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