GASOLINA, ELÉCTRICO, Y DIESEL
El nuevo Mini Countryman 2024, a prueba en CC: cambio radical para el menos mini
Nos hemos puesto al volante de la tercera generación del Mini Countryman, el menos mini, que cambia por completo, crece y se hace muy, muy tecnológico con una gama que incluye MEV, EV, gasolina y diésel.
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El nombre “Countryman” comenzó a sonar en el mercado a principios de los años 60, siendo la versión familiar del Austin Mini de la época. Bastantes décadas más adelante, en 2010, llegaría la primera versión contemporánea del Mini Countryman. Un modelo que comenzaría a mostrar una carrocería más elevada y funcional. En 2016, su segunda generación ya se posicionaba como un SUV con mucha clase, estilo y tecnología, un SUV con un estilo muy premium y muy Mini.
Y este año aterriza su tercera generación que, como ves, cambia por completo cualquier aspecto antes visto. El nuevo Countryman llega pisando fuerte, siendo el primer Mini en fabricarse en Alemania, utilizando energía verde con emisiones casi neutras, pensando en el medioambiente para convertirse en un modelo que promete elevar el concepto de la marca a otro nivel.
Y lo hace creciendo en tamaño, hasta los 4,43 metros, y dando un salto tecnológico gigante. En cuanto a su estética, su diseño es aventurero, pero a la vez minimalista, más aerodinámico y con una nueva firma lumínica con tecnología LED. Tiene un techo ligeramente curvado que puede ir en otro color diferente al de la carrocería, para dar esa sensación de techo flotante, con un pilar C que ahora incorpora elementos decorativos según el acabado. Además, el nuevo Mini Countryman prescinde de cromados tanto por fuera como por dentro, para reducir las emisiones de su proceso de fabricación.
En esta versión John Cooper Works, también destacan las nuevas llantas de hasta 21 pulgadas y los frenos deportivos sobredimensionados. Detrás, luce un estilo elegante pero también deportivo, incluso con un toque alemán que le queda como anillo al dedo, unido a un maletero de 460, ampliables hasta los 1.450.
Pero por si todo esto te parece poco, los cambios más espectaculares tienen lugar en su interior. Con una atmósfera completamente novedosa y personalizable que, pese a seguir la filosofía Mini, apuesta por mucho más minimalismo y, también, por la responsabilidad medioambiental, ya que se utilizan superficies textiles y materiales reciclados que dan forma a un salpicadero, asientos y diferentes inserciones del habitáculo.
Por fuera este nuevo Mini Countryman mola mucho, pero por dentro es aún más sorprendente. Tenemos que decir adiós al panel de instrumentos convencional. Ahora, en su lugar hay un Head up display donde podremos ver la información más importante.
Pero la joya de la corona es esta, la primera pantalla OLED circular de la historia equipada en un coche. Este es el cerebro que lo controla todo, gracias al nuevo Mini Operating System 9, con una interfaz muy intuitiva y moderna. Aunque es cierto que tienes que pasar un poco de tiempo con ella para sacarle partido a todas sus funciones y acostumbrarte dónde está cada una de ellas.
Y para rizar el rizo, es personalizable, con los diferentes “Modos de experiencia” o modos de conducción que, no solo cambian el comportamiento del coche, sino también la iluminación interior y la apariencia mostrada en la pantalla OLED. Incluso podemos seleccionar diferentes tacómetros: uno más vintage, moderno o deportivo. Además, de serie cuenta con conectividad completa con nuestro smartphone de forma inalámbrica.
El nuevo Mini Countryman es un modelo que se adapta a ti, para que tengas la mejor experiencia posible al volante. Además, contará con una amplia gama de motores, ya que no solo estará disponible en versiones 100% eléctricas. También se podrá elegir entre mecánicas gasolina y diésel.
Porque la combustión también puede ser eficiente, y el nuevo Countryman está disponible con versiones microhíbridas en ambos combustibles, con la ventaja de la etiqueta ECO de la DGT y potencias que oscilan entre los 163 y 218 CV. La más purista de todas, sin duda, es la versión John Cooper Works, que sigue más viva que nunca.
Y los Cero emisiones, llamados Countryman E y SE 4ALL, con tracción delantera y a las cuatro ruedas, respectivamente, cuentan con una autonomía que puede llegar hasta los 462 km, gracias a una batería de 66,5 kWh de capacidad.
Y al final, la cabra tira al monte. Por eso, hemos elegido la versión John Cooper Works, que se desmarca como la más deportiva de todas. Gracias a sus 300 CV y a la tracción a las cuatro ruedas, sales disparado en cada curva. Unido a una suspensión bastante deportiva, este Mini hace que tengas la sensación de estar conduciendo un kart, pero con espacio para toda la familia.
Sobre todo, gracias al modo “Go-Kart”, unido a una dirección bastante directa, que proporciona muy buen “feeling” de lo que ocurre en el asfalto. Y hace que te olvides que vas subido en un SUV. La sensación de control es total, algo que va unido a un amplio abanico de sistemas de ayuda a la conducción que velan por ti y le convierten en el primer Mini de nueva generación con un nivel de conducción semiautónoma nivel 2.
Si hay que ponerle alguna pega a esta versión deportiva, es quizás que tenga una suspensión algo dura para el día a día. Si quieres más comodidad, quizás sea mejor opción otra de las variantes disponibles. Pero si quieres deportividad a raudales, quédate con esta.
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