Probamos el Citroën ë-C4 X: amplitud y comodidad en un 100% eléctrico

Antes, cuando alguien quería un coche nuevo escogía entre berlina, compacto, familiar, todoterreno, deportivo y poco más. Hoy en día, los límites de tipología, estilo, segmento… están muy difuminados. Tanto que a veces uno no sabe definir muy bien lo que prueba.

El nuevo Citroën ë-C4 X tiene un poco de crossover, de berlina, de coupé… Todo esto en un modelo que mide 4,6 metros de largo, 1,8 de ancho y 1,5 de alto. Su diseño recuerda al C5-X, pero con la base del C4 que ya conocemos. Por fuera impacta más que por dentro porque es algo que no estamos acostumbrados a ver. Aunque en su interior te encuentras en un espacio bastante más familiar.

Este modelo cuenta con un cuadro de instrumentos digital, pantalla táctil de 10 pulgadas, conexiones bluetooth y USB, aplicaciones Android Auto y Apple CarPlay, una nueva interfaz heredada del C5-X... En resumen, tiene todo lo que se necesita en un vehículo hoy en día. Por suerte, los mandos del climatizador siguen siendo analógicos. Pero una vez en marcha, lo que más gusta es su postura al volante.

Entre el Citroën C-4 X puedes escoger entre motores gasolina, diésel o eléctrico. Es un coche en el que no pesan los kilómetros pese a ir un poco más alto de lo habitual, sin llegar a la altura de un SUV. Tienes buena visibilidad, el asiento es muy cómodo y todo queda al alcance de la mano. Desde los 100 CV del gasolina menos potente hasta los 134 CV del motor eléctrico. Los de combustión llevan todos caja de cambios automática de ocho velocidades. Y en el eléctrico se cuenta con una batería de 50 KW/h.

Como es habitual en los coches eléctricos, la suavidad y la comodidad de marcha es lo más destacable. A lo que se suma la autonomía de 360 kilómetros según el ciclo WLTP. Además, cumple con todo lo que le puedes pedir a un coche de este tipo. Pero, ¿para quién es un coche como este? Para una persona que busca un coche familiar pero no le convence el 'look' clásico de las berlinas de toda la vida.

En resumen, este Citroën ë-C4X igual no destaca por ser el más rápido de la carretera o por ofrecer la conducción más fina. Pero aquí no se trata de eso, aquí hay que ofrecer un coche que, por encima de todo, sea cómodo, sea amplio y con el extra de un diseño de lo más personal. Además de poder desplazarte en modo 100% eléctrico en tu día a día.

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