Probamos el Ford Ranger, el compañero ideal para irse de aventura y trabajar

Tener una pick-up no significa tener un vehículo aburrido que solo sirva para trabajar. Probamos laFord Ranger, que en su última generación promete mayor eficiencia, equipamiento y, sobre todo, hacernos pasar un rato divertido al volante; y es que trabajo y diversión no tendrían por qué estar reñidos.

A su diseño imponente se une el llamativo naranja de su enorme carrocería. Ciertamente, la estética en este caso sí que va de la mano y se trata de un coche muy indicado para recorrer las zonas más complicadas. Con 200 CV de fuerza y tracción total se mueve con gran efectividad por los caminos sin asfaltar. Fuera de ellos, su dirección ha mejorado en precisión y sus suspensiones son más confortables, aunque sigue notándose que lleva una suspensión de ballestas, necesaria para elevar la capacidad de carga.