Pequeño pero matón
Este fin de semana, en Centímetros Cúbicos, nos hemos dado una vuelta con el Skoda Kamiq, el SUV pequeño de la marca checa.
La palabra Kamiq procede de la lengua del pueblo Inuit, habitantes del norte de Canadá y Groenlandia. En esos bellos lugares, Kamiq significa algo que encaja correctamente. Con esa inspiración, nació el Skoda Kamiq, un coche con unos consumos, un tamaño y una potencia adecuados.
En su interior, el Kamiq destaca por su sistema multimedia, la conectividad y el gran número de asistencias a la conducción con las que cuenta. Equipo de sonido, navegador, Android Auto... Además, no se olvidan de los detalles, como un rascador de hielo o un paraguas.
En el exterior, destacan sus marcados rasgos tipo manga. Faros afilados, divididos en dos partes, con las luces diurnas en la parte superior... Y una llamativa parrilla y rejilla en el faldón delantero. Las ópticas traseras lucen el mismo estilo, terminando en la parte superior del portón del maletero, que ofrece una capacidad de 400 litros.
Si hablamos de motores, hay tres de gasolina de 95, 115 y 150 caballos. Este último con desconexión de cilindros, para recortar un poco el consumo. Y uno diésel, que es el que nos trae entre manos: el 1.6 TDI de 115 caballos. Además, hay una versión GNC que nos permitirá acceder al centro de las ciudades.
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