Ponemos a prueba el Hyundai Kona con su motor menos potente
Probamos el Hyundai Kona 1.0 TGDI de 120 CV: un crossover que ama la ciudad
El Hyundai Kona es una de las referencias de su categoría y hoy lo analizamos para ver los motivos
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La guerra en el mercado de los SUV urbanos está al rojo vivo y prueba de ello es que los lanzamientos de nuevos modelos se suceden cada poco tiempo. Uno de los más recientes es el Hyundai Kona, la apuesta de Hyundai para plantar cara a modelos como el Nissan Juke o el Renault Captur, pero también permitirse rivalizar frente a modelos de mayor empaque como el Volkswagen T-Roc.
La unidad que tenemos entre manos es el Hyundai Kona con motor 1.0 TGDI de 120 CV, cambio manual de 6 relaciones, tracción 4x2 y acabado Klass. Estamos por lo tanto ante uno de los motores más interesantes de la gama y el acabado intermedio disponible para esta mecánica. Aunque es bien sabida la estrecha relación que existe entre Hyundai y Kia, debemos subrayar que el Hyundai Kona emplea una plataforma específica diferente a la empleada por el Kia Stonic que parte de la usada por el Kia Rio. Este punto diferenciador es relevante en comportamiento tal y como veremos mas adelante.
El Hyundai Kona tiene una muy dura competencia en frente, con rivales muy logrados y puestos al día en aspectos clave con propulsores, asistencias a la conducción o infoentretenimiento. Por este motivo Hyundai no ha escatimado en recursos para que el Kona sea capaz de ofrecer todo tipo de posibilidades en estos apartados, aunque en nuestra unidad no podremos analizar la mayoría de ellas al tratarse de una configuración más bien tirando a “básica” si tenemos en cuenta todo lo que puede instalar el Kona en sus niveles de acabado más altos.
El motor 1.0 TGDI es un propulsor gasolina de nuevo desarrollo, con 3 cilindros y sobrealimentación con turbocompresor para ser la alternativa ideal frente a los motores diésel. Hablamos de un motor interesante por los 120 CV que ofrece, aunque dada su condición de 3 cilindros nos encontramos con un tacto, vibraciones y sonido no tan refinado como el que ofrece un 4 cilindros. Por decirlo de algún modo, otros motores de 3 cilindros de la competencia ofrecen un funcionamiento más redondo, sin embargo el tricilíndrico de Hyundai sí que brilla por su elasticidad y reserva de potencia. En materia de consumos podemos ubicar este propulsor en un término medio, pues con medias en torno a los 7,6 l/100 Km para un uso mixto ciudad/autovía no es el mejor 3 cilindros de su categoría, aunque tampoco el peor y a cambio sí que ofrece una respuesta más lograda que algunos de sus rivales.
La conducción del Kona me ha sorprendido por el comportamiento del coche en todos los escenarios. Pese a hablar de un coche que habla claramente de ciudad y se ubica en un término medio entre un coche urbano y un compacto, su conducción es más parecida a la de un compacto que a la de un urbano. Esto significa que nos encontramos con un coche cuyas reacciones son nobles, con unas suspensiones confortables pero al mismo tiempo lo suficientemente firmes para que la carroceríano se mueva en exceso. En su conjunto la calidad de rodadura del Hyundai Kona me ha parecido de las mejores de su categoría, aunque sigue estando un peldaño por debajo del más logrado – y también bastante más caro – Volkswagen T-Roc.
El diseño exterior del Hyundai Kona es arriesgado lo mires por donde lo mires, pero sobre todo es en su frontal donde más personalidad encontramos. No tengo ni duda de que se trata de esos coches que o los amas o los odias. En el interior el ambiente es mucho más sobrio y elegante, con una estética claramente inspirada en los Hyundai i20 e i30. En el Kona abundan los plásticos duros, aunque lo cierto es que estos transmiten sensación de calidad y robustez, lo que efectívamente se confirma con la ausencia de ruídos o crujidos y que confirma el buen nivel de ajuste y aislamiento del habitáculo. Nos encontramos con 5 plazas, ofreciendo buenas medidas para acomodar dos adultos en las plazas traseras de forma holgada con suficiente espacio para las piernas y el techo siempre y cuando no excedan 1,80 metros de altura. El maletero cubica 361 litros de capacidad, con una superficie de carga completamente plana desde la la propia boca de carga.
Dado que estamos a los mandos de un Hyundai Kona en acabado Klass, el equipamiento a destacar es reducido aunque sí que es cierto que al volante no se echan en falta más elementos. Sobre el salpicadero encontramos el sistema multimedia con pantalla táctil de 7” que goza de un funcionamiento sencillo, rápido y vistoso. En este nivel de acabado no existe aplicación de navegación, aunque sí es compatible con Android Auto y Appler Car Play. El climatizador es de serie, al igual que los 4 elevalunas eléctricos, las llantas de aleación de 16”, el sistema de mantenimiento de carril, el encendido automático de luces o el control de crucero.
El Hyundai Kona está disponible desde 13.990 euros en el mercado español. De entre todas las posibilidades que permite la gama en estos momentos, el motor 1.0 TGDI nos parece una de las mecánicas más recomendables, aunque tampoco podemos pasar por alto que más adelante está prevista la llegada de versiones diésel que pueden ser un factor clave para los que tengan previsto realizar grandes kilometrajes. Y sin olvidarnos por supuesto del Hyundai Kona eléctrico, la versión 100% eléctrica que promete una autonomía de hasta 470 kilómetros (WLTP).
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