Abarth ha creado uno de los roadster más pasionales y divertidos del mercado
Prueba Abarth 124 Spider: disfrute sin límite
Ponemos a prueba la visión más racing de Abarth, uno de sus coches más especiales, el 124 Spider
Publicidad
Desde que fuese anunciado hace años el desarrollo conjunto de un nuevo deportivo de tipo roadster entre Fiat y Mazda, los aficionados del mundo del motor hemos esperado con gran ansia la llegada de ambos conceptos al mercado. Pero la ecuación no sólo nos enamoraría con su resultado final, sino que además nos regalaría su mejor y más radical versión en clave Abarth.
Aunque pueda resultar difícil creer que a partir de una misma base se pueden desarrollar 3 personalidades diferentes, la realidad nos ha demostrado que el trabajo de Fiat, Mazda y Abarth tienen muy poco común. Cada marca defiende una filosofía muy distinta a las otras dos, siendo el Abarth 124 Spider el que sin lugar a dudas brinda el carácter más temperamental de las 3 opciones.
A nivel estético el Abarth 124 Spider se diferencia poco de su homólogo Fiat, dejando en el uso de llantas, paragolpes y logotipos específicos el grueso de sus cambios. Aún así existe una más que recomndable opción que permite instalar un vinilo negro mate, como nuestra unidad de pruebas, un color en contraste que confiere un look más racing al modelo y que además sirve de homenaje al antepasado de este deportivo.
En el interior los cambios son igualmente sutiles, de hecho el habitáculo es prácticamente idéntico al de Mazda o Fiat, salvando el uso de unos asientos de diseño específico, el tapizado en ante de diferentes partes de su interior o el empleo de algún mando o detalle específico como el cuentavueltas o el pomo del cambio. A pesar de ello, el habitácilo rezuma calidad y deportividad, aunque también un sorprendente nivel de confort acompañado de una postura de conducción ¡perfecta!
Los grandes cambios del Abarth 124 Spider los encontramos bajo su piel, pues es ahí donde Abarth ha obrado su magia para crear un coche peligrosamente adicitivo. Bajo el capó delantero se instala un motor 1.4 Multiair con 170 CV asociado a un delicioso cambio manual de 6 relaciones con envío hacia el tren trasero a través de un diferencial autoblocante específico. A ello también añadimos suspensiones Bilstein y un equipo de frenos Brembo de tacto y rendimiento excepcional. Y lo mejor está aún por llegar, pues el Abarth 124 Spider recurre a un escape Record Monza cuyo sonido en todo el rango de revoluciones es sencillamente espectaular. Solo el arranque ya ofrece una melodía sumamente placentera, pero es cuando exprimes cada caballo cuando caes rendido ante la magia de este roadster.
Conducir el Abarth 124 Spider es toda una experiencia, y aunque puede llegar a ser bastante rápido, su nivel de disfrute es tan alto que ni siquiera hace falta ir al límite para divertirse. Es rápido, preciso, rabioso desde abajo y dócil a medio gas. Su mejor escenario son las carreteras de curvas, cuanto más reviradas mejor, pues es ahí donde de verdad sorprende lo bien que va este pequeño descapotable, realizando cruzadas de infarto si te lo propones, pero siendo también muy efectivo si sabes exprimir su magnífico chasis.
No puedo negar que resulta muy difícil sacarle inconvenientes al Abarth 124 Spider pues su receta ha sido cocinada como muy buen tino. Aún así, siendo realmente justo no puedo pasar por alto que el Mazda MX-5 es su mayor enemigo y es con él donde encontramos las dos únicas pegas que se le puede poner al Abarth (ver prueba Mazda MX-5). Frente al Mazda MX-5 en su versión más potente, el Abarth 124 Spider ofrece un consumo superior (en torno a 2 l/100 Km), además de perder la magia y progresividad hasta el corte que ofrece el 2 litros atmosférico del nipón. Por otro lado el precio del Abarth 124 Spider es también bastante superior a su alternativa directa en el MX-5 con alrededor de 10.000 euros de diferencia, un precio que aunque supone añadir una puesta a punto con bastante más carácter y un toque extra de exclusividad, habrá que estudiar detenidamente para inclinar la balanza de un lado u otro.
Publicidad