LA PRIMERA T1 SE PRESENTÓ EN 1950
Prueba Volkswagen ID.Buzz: revisión de la simpática Budy en clave eléctrica
Uno de los puntos fuertes de este ID.Buzz es, que su diseño, ha logrado ser tan inconfundible como el modelo clásico de los años 50.
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En 1950 salió de la cadena de montaje la primera Volkswagen Combi T1, una simpática furgoneta que trajo una nueva era para el fabricante alemán, con un estilo que aún en la actualidad es todo un icono. Más de 70 años después, llega la reinterpretación de ese modelo pero, adaptándose a la nueva era 100% eléctrica, bajo el nombre de ID.Buzz.
De forma inteligente, Volkswagen ha querido rendir un homenaje a aquella T1, con una estética lo suficientemente reconocible pero, a la vez, con un toque moderno que no deja indiferente a nadie. Por un lado, el doble color de la carrocería, con el logo de la marca coronando el frontal, nos recuerda a otros tiempos, pero los faros delanteros con tecnología matricial LED, llantas aerodinámicas, y una trabajada aerodinámica, revelan que estamos delante de un coche del siglo XXI.
Dentro, como no podría ser de otra forma, encontramos una atmosfera digital con una pantalla detrás del volante, de 5,3 pulgadas, y otra central de 12, para el sistema de infoentretenimiento. Quizás, lo que más destaca en su interior, junto a una configuración de acabados peculiar, es su espacio disponible.
Con casi una batalla de 3 metros, el ID. Buzz puede alojar muy cómodamente a 5 pasajeros, que tienen a su disposición numerosos compartimentos portaobjetos. Complementado con un maletero muy amplio de 1.121 litros, ampliables hasta los 2.205.
Había pocos ejemplos de furgonetas 100% eléctricas en el mercado, y con este estilo casi ninguna. El Volkswagen ID.Buzz llega ofreciendo una carrocería pensada para viajar, tanto por carretera como por ciudad.
Este modelo está disponible, en la versión de batalla corta, con un motor trasero de 204 CV y una batería de 77 kWh de capacidad neta, que le proporciona una autonomía de hasta 417 km. Este 2024 incorporará en la gama una versión de batalla larga con hasta siete plazas, que no solo aumenta su potencia sino también la capacidad de su batería, hasta los 85 kWh. Y, en la cúspide, la versión GTX, con tracción total y 340 CV.
Esta versión con 204 CV y una batería de 77 kWh de capacidad nos permite hacer algún que otro viajecito, ya que deberíamos superar los 300 km reales en carretera con ella. Para algunos será suficiente, para otros no. Es perfecta para aquellos que necesiten espacio en sus vidas diarias, así como confort e insonorización interior, y, por otro lado, también para sus escapaditas de fin de semana.
Por suerte, el ID. Buzz tiene una potencia de carga alta, de hasta 170 KW, lo que le permite pasar del 5 al 80% en unos 30 minutos. Además, cuenta con numerosos asistentes a la conducción, entre ellos el Travel Assist, que velan por nuestra seguridad.
El ID Buzz tiene un comportamiento bastante diferente a otras furgonetas que he probado. Gracias a que su batería está en una posición baja, tiene un tacto deportivo bastante bueno y coge las curvas de cine. Se echa en falta algo más de autonomía para ir sobrados, pero por lo demás me parece un producto redondo, muy singular y que viene para establecer una nueva era dentro del fabricante.
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