Cupra presenta su e-Racer, el primer turismo eléctrico de competición

Cupra aprovechó el lanzamiento oficialmente de su marca para presentar el que era su primer vehículo de competición. El renombrado como Cupra TCR, el cual no dejaba de ser el exitoso SEAT León TCR, el modelo más veterano del reglamento que este año pasará a protagonizar la recién creada Copa del Mundo FIA de Turismos. Era el primer movimiento por parte de Cupra para reclamar esa identidad propia que en Martorell han querido dar desde el principio a esta nueva escisión de SEAT. La segunda ha llegado con forma de eléctrico.

Cupra sorprendía a propios y extraños presentado su primer vehículo de competición eléctrico apenas unos días más tardes de este pistoletazo de salida oficial. El Cupra e-Racer toma como base precisamente el SEAT León convencional, en este caso retirando el motor de combustión interna y adaptándolo a la nueva era de electrificación que asoma en el horizonte de la industria del automóvil.

Su nacimiento presenta un primer vistazo a lo que sería un reglamento TCR basado en coches alimentados por batería, campeonato en el que está trabajando la FIA y que podría llegar en un futuro no muy lejano después de que el máximo estamento internacional haya confirmado hace unos días la adaptación de la categoría reina del Mundial de RallyCross para utilizar únicamente ‘Supercars’ eléctricos que llegarán en 2020.

El Cupra e-Racer es por el momento un concept car desarrollado por el equipo dirigido por Jaime Puig y Xavier Serra capaz de hacer el 0 a 100 km/h en apenas 3,2 segundos y de superar los 270 km/h de velocidad punta. Según el equipo técnico responsable del proyecto, el modelo lleva equipados cuatro motores situados en el eje posterior, capaces de girar a 12.000 rpm y de entregar picos de hasta 500 kW (670 caballos), siendo 300 kW lo habitual (400 caballos). Además, equipa sistema de recuperación de energía.

La batería de 65 kWh que utiliza este nuevo coche eléctrico cuenta con 23 paneles de 264 unidades de carga cada uno. O lo que es lo mismo, cuenta con la capacidad de 9.000 teléfonos móviles conectados a la vez. A pesar de estas cifras, el vehículo puede ser recargado en apenas 40 minutos y el conjunto de la batería tan sólo representa 450 kilógramos del peso total del conjunto, una tercera parte. Precisamente el estudio de su colocación ha sido uno de los grandes retos que ha tenido el equipo de desarrollo, ya que en un vehículo de competición es incluso más importante contar con un buen reparto de pesos y con la posición del centro de gravedad lo más cercana al suelo posible. Respecto al León TCR de motor térmico el peso se incrementa en 300 kilos.

Su diseño puede anticipar lo que podemos esperar de los turismos de competición en el futuro, con llantas lenticulares, diseños agresivos para el kit aerodinámico y la sustitución de los retrovisores por cámaras para así reducir el drag que producen las carcasas tradicionales. ¿Llegará a los circuitos? Por el momento esto sigue siendo una incógnita, sin embargo, en SEAT Sport y Cupra quieren ponerlos sobre el asfalto para sus primeros test con la llegada del verano.