SEGÚN UNA CONSULTORA ALEMANA
Los coches eléctricos se deprecian (mucho) más rápido que los de combustión
El rápido avance de la tecnología juega en contra del mercado de segunda mano de estos modelos porque provoca una pérdida de valor mucho más rápida.
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Uno de los hándicaps con el que se encuentran los conductores que quieren comprar un coche eléctrico es su precio: los modelos que ofrecen una autonomía suficiente para el día a día y para viajar no suelen ser asequibles para la mayor parte de los bolsillos. Esta razón lleva a muchos a pensar en el mercado de segunda mano: es posible encontrarlos más baratos, pero son modelos a los que les cuesta mantener su valor inicial. Los coches eléctricos se deprecian mucho más rápido que los demás.
La consultora alemana Bähr & Fess Forecasts ha elaborado un informe al respecto que ha publicado Focus Online. Un estudio en el que se demuestra que este tipo de vehículos se devalúan mucho más rápido que los impulsados por motores convencionales de gasolina o diésel. Y en estos casos son los números los que mejor lo ejemplifican.
Combustión, eléctricos y enchufables
Analizando el valor residual de los modelos presentes en el mercado han llegado a la siguiente conclusión: los coches equipados con un motor de combustión pierden, aproximadamente, el 24,2% de su valor cuando han recorrido los primeros 15.000 kilómetros. Una estable depreciación parecida a la de los híbridos enchufables que logran mantener un valor suficiente para situarse, prácticamente, en el mismo nivel.
Los coches eléctricos, sin embargo, representan la otra cara de la moneda porque acusan mucho más ese descenso en su valor. Tanto es así que la depreciación puede llegar a ser de más de la mitad del precio inicial del vehículo. O lo que es lo mismo: duplican los porcentajes de los modelos de gasolina y diésel. Una situación para la que hay una explicación.
Las razones
Esa veloz pérdida de valor está directamente relacionada con el rápido avance de los modelos cero emisiones. Hay que tener en cuenta que hablamos de un mercado que se está desarrollando a grandes pasos y esto se traduce en una ampliación de las gamas y de los modelos disponibles. Por otro lado, la tecnología necesaria para desarrollar su mecánica y funcionamiento también crece a un ritmo muy alto mejorando, así, la autonomía, las baterías… Una buena noticia para los modelos nuevos y una mala para los de segunda mano, que se quedan obsoletos en períodos de tiempo cada vez más cortos.
Según Bähr & Fess señalan, hay dos coches eléctricos que serán los que menos depreciación sufrirás a corto plazo. El primer de ellos es el Seat Mii eléctrico y el segundo es el Škoda Enyaq iV 50, una versión que no está disponible en España ya que aquí la gama del Škoda Enyaq comienza con el iV 60. Sea como sea, tres años después de su compra retendría el 50,5% de su valor.
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