Analizamos a fondo el monovolumen eléctrico
¿Qué se siente al conducir el Mercedes-Benz EQV con 204 CV y 355 kilómetros de autonomía?
En Centímetros Cúbicos hemos tenido la oportunidad de poner a prueba el Mercedes-Benz EQV y explorar todas las cualidades de este monovolumen.
Publicidad
En Centímetros Cúbicos hemos puesto a prueba el Mercedes-Benz EQV. La submarca EQ de Mercedes designa a los modelos más eficientes de la gama, en este caso los cien por cien eléctricos, como el EQC, que fue el encargado de estrenar esta submarca. En este caso, probamos el segundo, el nuevo Mercedes-Benz EQV, que, a pesar de parecer un SUV, es un gran monovolumen 100% eléctrico.
A simple vista, es similar al Clase V de combustión. Sin embargo, los logos EQV lo delatan. Sus dimensiones son 1,9 de ancho y 1,9 metros de alto; la longitud varía dependiendo si hablamos de la versión de batalla larga y extralarga.
Dentro tiene espacio de sobra para un equipo de fútbol. Bueno, mejor dicho, de fútbol 7, ya que el nuevo EQV se puede configurar con 6, 7 u 8 plazas, con unos acabados de lujo. Lujo y confort que también presentes en la parte delantera, con asientos tapizados y sistema multimedia con pantalla de 10,25 pulgadas, junto a la tecnología MBUX con asistente de inteligencia artificial. Este sistema incluso calcula, al introducir el destino, si tendremos que parar a cargar el coche.
Tiene una capacidad de 90 kiloWatios-hora útiles y, a través de una toma de 110 kiloWatios, puede recargarse del 10 al 80% en menos de 45 minutos. Con el 100% de la carga, es capaz de realizar hasta 357 kilómetros, según el ciclo WLTP. Una cifra que no está nada mal, teniendo en cuenta que tiene una batería similar a la de su hermano de gama, el EQC. Pero este monovolumen pesa 2.635 kilos. Es decir, 200 más.
Y, para mover sus más de dos toneladas y media, cuenta con un motor eléctrico de 204 CV de potencia, situado en el eje delantero. Es cierto que no tiene esa gran patada que esperas de un vehículo eléctrico y la potencia no llega a ser tan instantánea. Tiene diferentes modos de conducción: Economy Plus, Economy, Confort y Sport. Aunque cuenta con un asistente ECO que actúa de forma automática para cambiar diferentes parámetros y maximizar la eficiencia..
No es un coche pensado para ir rápido, eso está claro. Pero sí para proporcionar una conducción suave, relajada y tremendamente cómoda gracias a su suspensión neumática. Y, también, segura, porque viene cargado de numerosos asistentes a la conducción, como el control de ángulo muerto o asistente de frenada activa. Además, se une a la lista de modelos que se fabrican en nuestro país, ya que se produce en la fábrica que la marca tiene en Vitoria.
Vuelve a ver los programas completos y mejores momentos de Centímetros Cúbicos en Atresplayer.
Publicidad