Será obligatorio
El sistema que todo coche eléctrico e híbrido deberá equipar a partir de julio
La señal acústica o AVAS será requisito indispensable en todo coche eléctrico e híbrido que se fabrique a partir de julio de este mismo año.
Publicidad
Las mecánicas eléctricas están destinadas a dominar el sector automovilístico cueste lo que cueste, y muchas marcas dan constancia de esta evolución. Por supuesto, es necesario un contexto que ayude a asentar esta nueva movilidad, y un marco legislativo acorde. Con esta premisa, la Unión Europea acaba de anunciar que todo coche híbrido y eléctrico fabricado a partir del próximo mes de julio deberá incorporar de manera obligatoria una señal acústica o sistema AVAS.
Bien es cierto que esta medida -muy lógica al tratarse de coches que no emiten ruido mecánico- lleva siendo obligatoria desde julio de 2019 sobre todo vehículo híbrido y eléctrico de nueva homologación. Pero a partir del mes que viene será obligatorio en todo coche nuevo que recurra a cualquiera de estas dos mecánicas.
Se trata de un sistema de seguridad para peatones, puesto que su intención es que estos se percaten de la presencia del coche cuando circula en modo eléctrico o, en su defecto, tiene una única mecánica de dicho tipo. La señal acústica deberá actuar marcha atrás y desde el inicio de la marcha hasta una velocidad máxima de 20 km/h, velocidad lo suficientemente baja como para tener que advertir a los viandantes de la presencia del vehículo.
Además, la ley estipula que este sonido debe ser superior a los 56 decibelios e inferior a los 75 decibelios, nivel máximo para los vehículos de combustión. La señal AVAS por tanto no solo será de carácter obligatorio para los coches 100% eléctricos, sino también para los híbridos enchufables e híbridos convencionales.
Esta señal acústica deberá ser continua y emitir un sonido similar al de un coche de gasolina convencional. Otro rasgo propio de este sistema seguridad será la elevación del mismo a medida que se aumente la velocidad, para hacer llegar a los viandantes de manera ferviente la aproximación de un coche más lento o más rápido.
Por supuesto, este sistema no se podrá desactivar en ningún momento, por lo que no existirá un accionamiento concreto para ello. Lo que sí se espera, es que los propios fabricantes ofrezcan cierta personalización en la tonalidad de la señal acústica, permitiendo así a los clientes modificarla en ciertos matices pero sin alterar los rasgos que estipula la ley.
Te puede interesar: ¿Cómo es la ITV de los coches híbridos y eléctricos?
Publicidad