quinta generación del suv japonés
El SUV compacto de Toyota acumula ya cinco generaciones convirtiéndolo así en uno de los precursores de esta categoría.
Hemos puesto a prueba la nueva generación del RAV4, un SUV compacto que tiene a sus espaldas nada menos que cinco generaciones y es un destacado precursorr de esta categoría. Uno de los modelos más importantes de la marca a nivel de ventas, así como uno de los coches de referencia en su segmento por ser el primero en defender la motorización híbrida tanto en configuración 4x2 (unidad de prueba) como 4x4.
La anterior generación del Toyota RAV4 ya demostró que el mercado posee un elevado interés en los motores híbridos para este tipo de SUV, algo que se reflejó en las ventas con una importante cuota para la mecánica híbrida. De este modo y aprovechando la caída en desgracia del diésel, Toyota decidió apostarlo todo al motor híbrido para confeccionar una gama donde solo encontramos una mecánica híbrida gasolina compuesta por un motor de 2,5 litros atmosférico y un motor eléctrico trabajando de forma conjunta a través de la transmisión e-CVT. Las baterías son NiMh y están alojadas bajo los asientos traseros.
Aunque quizá nos suene esta configuración de motor híbrido de otros modelos de Toyota y Lexus, en realidad estamos ante una planta completamente nueva estrenada por el Toyota RAV4 y disponible en potencia de 218 CV para la versión 4x2 y potencia de 222 CV si optamos por la configuración 4x4. A nivel técnico la posibilidad de escoger el tipo de tracción es la única opción que brinda la gama RAV4.
Si hablamos de la variante 4x4 nos encontramos con otra de las grandes novedades del RAV4 con respecto a su anterior generación que ya permitía una configuración similar. Con el objetivo puesto en ofrecer un mejor desempeño fuera de asfalto, aunque sin penalizar los consumos, el RAV4 4x4 instala un motor eléctrico independiente en el eje trasero para asistir al eje delantero cuando se detecten pérdidas de agarre.
Además, también se añade un modo de conducción específico para el uso offroad denominado Trail Mode, un programa que simula el trabajo de un bloqueo de diferencial, permitiendo así controlar cada rueda de forma independiente para mejorar el agarre.
Siguiendo con el apartado dinámico el nuevo RAV4 destaca por ofrecer un alto nivel de confort y estabilidad. Los ingenieros de Toyota han sabido encontrar el difícil equilibrio entre ambos puntos, lo que nos deja con un SUV que asienta bien en curva si balancear en exceso, pero que al mismo tiempo resulta cómodo de conducir en todo tipo de firmes.
Si nos centramos en la mecánicas nos encontramos una de cal y otra de arena. Como suele ser habitual en las mecánicas híbridas de Toyota nos encontramos con una absoluta prioridad por la eficiencia que nos deja con el tacto artificial de su transmisión, una sensación de resbalamiento infinito que hace que la aceleración no sea tan contundente como cabe esperar de sus más de 200 CV.
Pero también es justo resaltar que en este nuevo propulsor se ha mejorado mucho la respuesta y el tacto con respecto a anteriores generaciones, lo que hace que tras un periodo de adaptación a su forma de trabajo nos olvidemos. En términos de suavidad y confort nos encontramos con una mecánica de las mejores de su clase, especialmente en ciudad que es donde más y mejor trabaja en pos de la eficiencia.
De puertas hacia dentro el Toyota RAV4 también ha visto grandes cambios. Nos encontramos un habitáculo de diseño sobrio y calidad de construcción notable, con buenos ajustes y materiales en la práctica totalidad de la cabina. El equipamiento disponible es amplio y en su oferta cabe destacar las amplias posibilidades que se brindan en tanto a asistencias a la conducción y seguridad activa desde los acabados más básicos.
Como punto a mejorar nos encontramos con un cuadro de instrumentos de tintes clásicos por diseño y funciones, aunque con posibilidad de integrar una pantalla a color de hasta 7”, al igual que un sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de hasta 8 pulgadas que si bien cumple, está lejos de los equipos que ofrecen muchos de sus rivales por conectividad, diseño o posibilidades.
En lo referente a consumos el Toyota RAV4 homologa unos consumos de 4,6 l/100 Km para la versión 4x2 y 4,5 l/100 Km para la variante 4x4. Hablamos de registros realmente buenos en su categoría que le permiten no pagar impuesto de matriculación gracias a unas emisiones que no superan los 105 gramos de CO2 y además obtener la etiqueta ECO. Cumple así la promesa de ser una verdadera alternativa al motor diésel.
Como no podía ser de otro modo la habitabilidad es uno de los puntos fuertes del RAV4, con capacidad para viajar con 5 adultos de forma cómoda y un maletero de 580 litros de capacidad, ampliable hasta los 1.690 litros, entre los de mayor capacidad del segmento. Además tiene un doble fondo para alojar una rueda de repuesto. El piso del maletero se cubre con una superficie de goma para una limpieza más fácil.
Conclusiones
El RAV4 de quinta generación ya no sólo es un todocamino apropiado para incursiones por el campo o la nieve. Ahora ofrece un uso más polivalente por mayor confort y refinamiento, por mejores prestaciones, por menor consumo mediante una propulsión híbrida optimizada, y por la tecnología de seguridad y ayuda a la conducción que incluye de serie. La unidad probada, con motor de gasolina y eléctrico genera una potencia conjunta de 218 CV. Tiene tracción delantera, cambio automático y acabado Luxury.
El Rav4 probado tiene un espacio interior amplio, un diseño del entorno de conducción agradable a la vista, asientos confortables de piel fina, un comportamiento dinámico noble y una autonomía para viajes largos que puede alcanzar los 900 km. Uno de los modelos competidores con precio por encima está en familia, el Lexus NX 300h Eco 2WD, automático y una potencia conjunta de 197 CV (sin descuentos 41.900€).
El grupo propulsor compuesto por un motor de gasolina de 177 CV y otro eléctrico de 120 CV rinden en conjunto 218 CV. Su funcionamiento es suave y silencioso a velocidades legales en autovías, incluso en ciudad cuando el motor eléctrico tiene más protagonismo. A más velocidad en cuestas prolongadas y cuando requiere mayor esfuerzo se torna algo ruidoso, pero nada molesto.
Consumo razonable por potencia y tamaño
En esta prueba hemos hecho un promedio de 6,5 litros/100 km. Un buen dato para un vehículo de semejante envergadura y peso. En ciudad, donde el motor eléctrico tiene más protagonismo, tanto por baja velocidad como por recuperación de energía en frenadas, el consumo ha sido más bajo (entre 5,5 y 5,7 litros/100 km), mientras que por autovías a velocidad constante con dos ocupantes y bultos pequeños llegó a gastar entre 6,6 y 6,8 litros cada 100 km. En ciclo combinadola autonomía del depósito puede ser de unos 855 km.
El comportamiento dinámico es noble. El confort de marcha es similar al de un turismo. Las suspensiones son equilibradas, de tipo confortable. En cualquier situación sujetan bien la carrocería y con razonables inclinaciones. En curvas, las reacciones son un puntito lentas y poco deportivas. En la absorción de baches y arrugas del asfalto cumple sobradamente. Por lo que ha ganado puntos para circular por carreteras y autovías para desplazamientos largos.
Por pocos kilómetros hemos probado el RAV4 fuera del asfalto. La unidad de prueba (4x2) pese a no contare con tracción total se desenvuelve con cierta soltura por pistas no muy accidentadas gracias a su altura libre de 190 mm. Nos sorprendió su buena amortiguación en estos tramos, sin rebotes ni ruidos exagerados en el salpicadero y la consola, lo que también demuestra que hay buenos ajustes de sus piezas.
El habitáculo destaca por su amplitud y modularidad. Muestra un diseño práctico y con materiales de mejor calidad que el de sus antecesores. Al consola con pocos mandos como es la tendencia y una pantalla táctil de 8” que agrupa muchas funciones del vehículo. Las cotas interiores de altura, anchura y espacio longitudinal para las piernas son más que razonables e ideales para que viajen cuatro adultos muy cómodos.
El equipamiento de serie de la versión probada es muy completo. Entre lo más importante en seguridad incluye: sistema pre-colisión con detector de ciclistas y peatones, cámara de visión de 360º, sensores de aparcamiento delantero y trasero, detector de vehículos en ángulo muerto, faros LED y control inteligente de luces de carretera, control de crucero adaptativo y limitador de velocidad, alerta de cambio involuntario de carril y llamada de emergencia E-Call.
La dotación de confort Luxury sin sobreprecio incluye: arranque inteligente sin llave, climatizador bizona, freno de mano eléctrico, luces automáticas, iluminación interior temporizada, tapicería y volante de cuero, lunas traseras tintadas, portón trasero de apertura eléctrica y muchos elementos más. En sonido y multimedia cuenta con cinco entradas de USB, antena de techo tipo aleta de tiburón, cargador inalámbrico de Smartphone, conectividad W-Fi, conexión Bluetooth con audio streaming, navegación GO, pantalla táctil de 20,3 cm, reconocimiento de voz y sonido Premium JBL.