Lamborghini Temerario, el reemplazo del Huracán está hecho también para altos

Ya con la presentación del Lamborghini Urus en su versión híbrida, Lamborghini adelantó que no habría que esperar demasiado para conocer su tercer modelo electrificado. La firma de Sant’Agata Bolognese aprovechó un mes con pocas noticias como el mes de agosto para presentar uno de los deportivos más rápidos de su historia: el Lamborghini Temerario, o lo que es lo mismo, el vehículo llamado a completar la difícil misión de reemplazar al Lamborghini Huracán.

Lo hará en este caso con una receta diferente, ya que la mecánica no seguirá siendo en este caso un V10 atmosférico el que se encargue de generar la potencia, sino que se optará en este caso por un V8 de 4.0 litros con doble turbo creado desde cero que se encontrará asociado al apartado eléctrico. Quizás el otro punto más novedoso es que estamos frente al primer Lamborghini que de serie se mueve por tener un eje delantero motriz, algo que consigue con una configuración que se asemeja a la que utilizan los Le Mans Hypercars del WEC.

Concretamente cuenta con dos motores eléctricos refrigerados por aceite que se encargarán de mover al Lamborghini Temerario cuando este se encuentre en modo 100% eléctrico, mientras que el tercero se encuentra situado entre el propulsor térmico y la caja de cambios. En caso de funcionar de forma conjunta con el motor de combustión bi-turbo, entonces hablamos de una potencia total de 920 CV de potencia, anunciando unas prestaciones de 0 a 100 km/h en apenas 2,7 segundos y una velocidad máxima situada en 340 km/h.

Todo ello se encuentra a su vez asociado a una caja de doble embrague y ocho relaciones, así como a una caja de cambios con una capacidad de 3,8 kWh, una cifra que si bien permitirá recargas muy rápidas con un puerto de carga de Corriente Alterna, sí que es cierto que no se espera una autonomía eléctrica demasiado destacada, aunque este esquema mecánico sí que le permitirá reducir significativamente las emisiones. El sistema también permitirá la recarga de la batería mediante la frenada regenerativa o utilizando el propio V8.

Entre las chucherías que tiene la electrónica diseñada por Lamborghini nos encontramos no sólo con el Launch Control, sino también con un ‘Drift Mode’ que derivará la entrega de potencia al tren posterior, permitiendo a su vez elegir entre tres modos distintos, por lo que se permitirá que cada conductor pueda ajustar el ‘caballaje’ disponible (también en el eje delantero) dependiendo de las condiciones de agarre, de su pericia al volante o del reto que esté dispuesto a asumir.

En cuanto a la imagen, es evidente que Lamborghini ha querido dejar sin alterar demasiado su filosofía de diseño, por lo que sigue unas líneas muy similares a las del Revuelto o a las del propio Huracán que sustituye, aunque se puede hablar de una imagen más agresiva y quizás mucho menos limpia que la de este último.

Mirada afilada gracias a sus ópticas LED, sumadas a las luces de posición hexagonales, el Lamborghini Temerario, parecen servir como pequeño homenaje al clásico Countach (y a su versión moderna, el LPI 800-4), mientras que los datos de carga aerodinámica han mejorado gracias al trabajo que se ha realizado especialmente en el frontal, consiguiendo unos datos del 103% mejor que el Huracán Evo en lo referente a las mediciones realizadas antes del eje trasero. Puede ser incluso mejor si contamos que el pack Alleggerita, con la incorporación de un spoiler de mayores dimensiones, cambios en el parachoques y en las llantas, así como otras modificaciones, le permiten conseguir un aumento que se dispara hasta el 158% si tomamos como referencia precisamente también la versión Evo de su predecesor.

Precisamente el Temerario no sólo sustituirá al Huracán en los concesionarios y catálogos, sino que hará lo propio también en competición esperando que podamos ver a la versión GT3 a principios del año 2025, con una posible entrada en competición un año más tarde, mientras que el Huracán que participa en el trofeo monomarca también se espera que sea reemplazado por el Temerario (nombre que recibe en honor a un toro mexicano llamado Temerario, criado por la Ganadería de Begoña) de cara al año 2027.

En competición también se esperan mejoras aprovechando entre otras cosas que el Lamborghini Temerario cuenta con un nuevo chasis ligero fabricado íntegramente en aluminio que es capaz de reducir en un 50% el uso del material respecto al de carbono-aluminio del Huracán, mientras que se utiliza menos de juntas soldadas y se consigue una mayor rigidez torsional manteniendo a raya el peso del conjunto. Todo ello, sumado a que no se dependerá de un desarrollo conjunto con Audi como el que se realizó de forma paralela con el R8, permitirá a Lamborghini sacar toda la esencia del Temerario.

Un choche hecho para altos:

En el interior, esas formas hexagonales que vemos en el exterior en los últimos diseños de Lamborghini tienen continuidad, presumiendo a su vez de la pantalla táctil de disposición vertical de 8,4 pulgadas o la instrumentación digital de 12,3 pulgas de que se complementa con la pantalla frente al pasajero de 9,1 pulgadas. Todo este despliegue tecnológico viene de la mano del anuncio de que estamos ante un habitáculo también pensado para personas altas, lo que permitirá que, incluso personas con una altura de 1,98 metros puedan ponerse el casco para pilotar este coche en circuito.

Por el momento se desconoce el precio de comercialización del Lamborghini Temerario en nuestro país, aunque sí se espera que llegue a la venta a finales de este mismo año o a principios de 2025.

Porsche celebra su 75 aniversario con una exposición itinerante