Coberturas de seguros para coches eléctricos que no incluyen las pólizas de los vehículos de combustión

Si ya hay muchas diferencias entre conducir un coche a gasolina y un coche a diésel, la diferencia es mucho mayor cuando hablamos de un coche eléctrico. Este tipo de coches requiere una conducción diferente y más efectiva, además de unos mantenimientos más específicos en ciertos componentes. Por este mismo motivos el seguro de un coche eléctrico es diferente e incluye algunas coberturas específicas.

Una de las cosas más importantes de un coche eléctrico es la batería y es por ese motivo que existen todo tipo de coberturas en relación a ella. Por un lado, existe la cobertura por robo de batería, mientras que por el otro la asistencia en carretera en caso de agotamiento de energía.

En relación a todo el cableado eléctrico, existen coberturas específicas para la sustitución o reparación de posibles daños. En este sentido están cubiertos tanto las taras o defectos, como los daños generados por posibles incendios. También se suele cubrir el robo del cable eléctrico con el que se carga el vehículo, que suele ser bastante caro.

Por último, las aseguradoras ofrecen una asesoría específica en el caso de tener un coche eléctrico. Estas facilitan información sobre la instalación de puntos de carga, la solicitud de subvenciones y hasta te indican donde hay lugares para cargar el vehículo.

Costes de coches eléctricos frente a vehículos de combustión

Los vehículos eléctricos compactos en relación con los coches de gasolina y diésel son ahora más baratos en lo que a costes se refiere en la mayoría de los países europeos, entre ellos, España, según el Índice de Costes de Coche 2021 de LeasePlan.

Este índice analiza lo que denomina el 'Coste Total de Propiedad (TCO)' de un coche, que incluye el combustible/energía, la depreciación, los impuestos, el seguro y el mantenimiento, y recopila los datos de 22 países europeos, entre ellos España.

En los pocos países en los que los VE aún no son competitivos en cuanto a costes, la diferencia de precios entre los VE y los coches de gasóleo/gasolina se ha reducido considerablemente. Si la tendencia continúa, es probable que los VE alcancen la competitividad de costes en todos los países estudiados, incluidos los mercados de Europa del Este, como Rumanía y Polonia, a mediados de la década de 2020.

En concreto en España, la diferencia entre los coches según su motorización varía en 156 euros. El coste total de propiedad (TCO) medio en los coches de gasolina asciende a 1.092 euros, el diésel a 1.063 euros, los híbridos a 1.047 euros, mientras que los eléctricos sólo asciende a 936 euros.