El sistema Sac Actun suma ahora 347 kilómetros de cuevas subacuáticas tras descubrirse que está conectado con el sistema Dos Ojos, que ocupaba el cuarto lugar en tamaño. El nombre de este último desaparecerá ahora que se ha descubierto la unión entre ambos.
"El equipo logró, después de una intensa temporada de trabajo de diez meses, hallar la conexión de dos de los sistemas de cuevas inundadas más grandes del mundo", ha indicado en un comunicado el proyecto Gran Acuífero Maya (GAM).
'Nos da una enorme y maravillosa perspectiva para entender los patrones de asentamiento antiguo'
El director del proyecto GAM e investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, Guillermo de Anda, ha calificado al hallazgo de "asombroso" y ha expresado que espera que éste ayude a entender el desarrollo de la vida en la península de Yucatán.
"Nos da una enorme y maravillosa perspectiva para entender los patrones de asentamiento antiguo, cómo pudieron desarrollarse", ha insistido el arqueólogo. "Nos hace entender de manera mucho más clara cómo se van dando también los grandes asentamientos prehispánicos que conocemos", ha añadido.
La península de Yucatán está llena de reliquias monumentales de la civilización maya, cuyas ciudades se basaron en una extensa red de pozos vinculados a aguas subterráneas conocidas como cenotes. Algunos cenotes adquirieron un significado religioso particular para los mayas.
El director de exploración del proyecto GAM, Robert Schmittner, comenzó a bucear a través de cientos de kilómetros de cuevas sumergidas de la región hace dos décadas y, junto a un equipo de buzos, ha dedicado los últimos 14 años al sistema Sac Actun.