A partir de junio, 38 centros de toda España van a empezar a hacer un cribado para detectar posibles casos de cáncer de pulmón, como se hace por ejemplo con el de colon o de pecho. Una medida que han anunciado debido a que el de pulmón, es el cáncer con mayor mortalidad en todo el mundo.
La prueba consistiría en hacer un TAC a esas personas con una mayor probabilidad de sufrir un cáncer de pulmón. "Se hará a pacientes entre 50 y 75 años que sean exfumadores de menos de 15 años o que tengan un consumo activo de cierta cantidad de tabaco", explica Juan Carlos Trujllo, coordinador del proyecto Cassandra y cirujano del Hospital Sant Pau.
Si en la prueba se detecta cáncer, ese paciente comenzaría un tratamiento. Si la prueba es negativa, se le haría un seguimiento durante cinco años
Cada año en España, se detectan 30.000 casos de cáncer de pulmón y de esos, solo un 15% se detecta a tiempo. El objetivo de este proyecto, denominado Cassandra, es reducir la mortalidad.
"Detectar la enfermedad en una fase asintomática y en la cual tenemos la posibilidad de ofrecer todos los tratamientos", indica Juan Carlos Trujillo.
En la selección de los pacientes, las médicas y mídicos de cabecera jugarán un papel muy importante. "El reclutamiento de los pacientes va a ser a través de Atención Primara", desvela Mario Bárcena, portavoz de la SEMG en el proyecto Cassandra.
La Sociedad Española de Neumología calcula que estas pruebas podrían reducir entre un 20 y 40 % la mortalidad del cáncer de pulmón. Los resultados obtenidos, explican, se analizarán para tratar de instaurarlo en toda la red del Sistema Nacional de Salud.