Un ensayo aleatorizado
de fase III (que evalúa la eficacia y seguridad del tratamiento con una muestra
amplia de pacientes), presentado en una rueda de prensa de la Reunión Anual de
la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO), muestra por primera vez
"un gran beneficio" para los pacientes con adenocarcinoma ductal
pancreático no metastásico (PDAC), que representa el 90% de todos los casos.
El estudio demuestra que
"podemos ayudar a los pacientes con cáncer de páncreas a vivir mucho más
tiempo", dijo el autor principal Thierry Conroy, oncólogo médico y director
del Institut de Cancerologie de Lorraine en Nancy (Francia). Las personas con
cáncer de páncreas extirpado quirúrgicamente que recibieron mFOLFIRINOX, un
régimen de quimioterapia que contenía cuatro medicamentos diferentes, vivieron
una mediana de 20 meses más que quienes recibieron el tratamiento estándar
actual, gemcitabina (Gemzar).
El ensayo reclutó
pacientes con PDAC que se sometieron a cirugía para extirpar todo o casi todo
el tumor (lo que significa que no hay células cancerosas visibles para el cirujano
después de la cirugía, pero las células tumorales microscópicas han
permanecido). La cirugía es posible en solo el 10-20 % de los pacientes con
cáncer de páncreas en general.
De tres a 12 semanas
después de la cirugía, 493 pacientes fueron asignados aleatoriamente en Francia
y en Canadá para recibir mFOLFIRINOX o gemcitabina durante seis meses. En un
periodo de seguimiento de 33,6 meses, la mediana del tiempo sin recidiva de
cáncer de páncreas (supervivencia libre de enfermedad) fue mucho más prolongada
en el primer grupo (21,6 meses frente a 12,8 meses), al igual que mediana de
supervivencia global (54,4 meses frente a 35 meses). El beneficio se observó en
todos los subgrupos de pacientes.
"El cáncer de
páncreas es notoriamente agresivo y generalmente tiene un mal pronóstico, por
lo que es una gran victoria descubrir que un nuevo régimen de tratamiento
mejora significativamente la supervivencia de los pacientes con esta enfermedad
", dijo el experto de ASCO Andrew Epstein.