Gracias a esto se podría cambiar la vida de mujeres que padecen trastornos como la artesia vaginal, donde la vagina está cerrada defectuosamente o ausente, o el síndrome de Mayer-Rokitansky-Küster-Hauser (MRKH), en el cual el aparato reproductor no se ha desarrollado completamente.
LA IDEA FUTURISTA PODRÍA SER UNA REALIDAD