Un equipo de científicos del CSIC ha desarrollado un dispositivo capaz de detectar el coronavirus SARS-CoV-2 a través de una muestra de saliva. Sin embargo, este test, más rápido y menos invasivo que las PCR, no encuentra quién lo fabrique en España, debido a la falta de inversión en ciencia y la falta de empresas de alta tecnología en el país para desarrollarla.
La científica que lidera el equipo, Laura Lechuga, investigadora del grupo de biosensores del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2), explica a laSexta el funcionamiento del test: "La idea es tomar una muestra de saliva del paciente y colocarla en este chip. En caso de que el virus esté presente, lo atrapa".
Este test ya se encuentra en pruebas de laboratorio y, a posteriori, llegarán las valoraciones clínicas. Pero ahí es donde, según Lechuga, se encuentran con "el mismo tope": encontrar empresas que los fabrique y comercialice.
"Sabemos usar la tecnología muy bien, pero no la creamos"
"¿Tenemos empresas en el país que pudieran hacerse cargo del desarrollo? Esa es la primera pregunta. Quizá hay pocas o muy pocas", razona la investigadora.
El problema de la ciencia en España, de acuerdo con Lechuga, es que "aquí sabemos usar muy bien la tecnología, pero no la creamos. Con la ciencia básica tan buena que hacemos se puede hacer tecnología y esa puede acabar en productos de alto valor añadido".
Lo necesario, entonces, es apostar por la innovación y por cruzar el umbral del 2% del PIB en ciencia, ya que en los ranking "salimos siempre de los últimos. Todo lo que es innovación, transferencia de tecnología, estamos siempre por debajo"