La producción teatral ha bajado más de un 60% con el actual IVA cultural, situado al 21%, al que los empresarios culpan de este descenso. Jesús Cimarro, presidente de los empresarios de teatro y danza, opina que están "trabajando para Hacienda, y es muy duro decirlo". Este afán recaudatorio causa un repunte en la economía sumergida. "Hay empresas que prefieren pagar a los trabajadores en negro, porque sino cierran", afirma Jesús.

Los productores se sienten engañados porque el gobierno les prometió reducir el IVA, e incluso algunos de ellos han llegado a perder 80.000 euros a la semana. Marcos Cámara, productor teatral, comenta que "esto se iba a paralizar antes de las elecciones europeas".

De esta manera, la mayoría del dinero de una entrada sigue siendo para el IVA, el autor, la gestión de la venta de entradas, alquiler de teatro o publicidad. Por lo tanto, productores y técnicos se llevan una parte mínima. En París, el teatro lleva un 2,1% de IVA y no se declara en las primeras funciones.

Una compañía ha llevado a cabo una curiosa iniciativa como protesta, que consiste en regalar entradas con revistas porno, dado que estas solamente tienen un IVA del 4%. Otros han hecho lo mismo con zanahorias, huevos y manzanas.