El rodaje de 'En los límites de la realidad' cambio las medidas de seguridad en el cine. Las explosiones pirotécnicas afectaron a un helicóptero que acabó estrellándose contra uno de los protagonistas y dos niños, murieron los tres. A partir de ese momento se prohibió que los niños participasen en escenas de riesgo por la noche.
En 'El Mago de Oz' no todo fue tan mágico. El hombre de hojalata no era el original y tuvieron que rodar otra vez todas sus escenas porque el genuino estuvo a punto de morir asfixiado por culpa del maquillaje. A otro actor se lo tuvieron que cambiar para evitar que le pasase lo mismo.
Por otro lado, la bruja mala ardió de verdad. No fue ningún aquelarre, ya que se colocó mal en una de las trampillas por las que desaparecía y otra vez el maquillaje, mezclado con el fuego, le provocó quemaduras que la dejaron en el hospital seis semanas.
En 'Cleopatra', fue Elizabeth Taylor la que puso el rodaje en peligro. Primero una neumonía la dejó en coma y luego, una intoxicación alimentaria. El rodaje se retrasó dos años.
La estrella marca el ritmo, algo que no pasa con alguien que no es tan imprescindible para los directores. En 'Deadpool 2', una especialista moría este lunes al estrellarse con una motocicleta, y mientras que en 'Cleopatra' estuvieron dos años esperando, en 'Deadpool' han esperado dos días. Ya se ha reanudado el rodaje.
