La primera foto del perfil de Instagram de Claire Eileen Qi Hope es de 2018: cerca de 300.000 usuarios dieron 'like' a una imagen en la que se ve a una joven con un fajo de billetes apoyado en la cara. No tiene muchas fotografías, y en la mayor parte de ellas aparece junto a billetes, muchos billetes. La última publicación desde la cuenta de Lil Tay, como se conoce a Claire, ha cobrado aún más protagonismo si cabe, hasta el punto de que se ha borrado horas después. La razón: era un post de Instagram en el que, a modo de comunicado, se informaba de la muerte de la pequeña 'influencer' de 14 años.
"Con un gran dolor en el corazón anunciamos la devastadora noticia sobre la trágica y repentina muerte de nuestra querida Claire. No tenemos palabras para expresar la insoportable pérdida y el indescriptible dolor. Ha sido totalmente inesperado y nos ha dejado en shock. La muerte de su hermano añade aún más inimaginable profundidad a nuestro dolor. Durante este tiempo de inmenso duelo, pedimos por favor privacidad para que podamos llorar esta abrumadora pérdida, ya que las circunstancias en torno a la muerte de Claire y su hermano aún están siendo investigadas. Claire estará siempre en nuestros corazones, su ausencia deja un irremplazable vacío que sentirán todos aquellos que la hayan conocido y querido".
Casi 24 horas después, el comentario con el comunicado desaparecía y la propia Lil Tay salía a anunciar que nada era verdad, que sigue viva. "Quiero dejar claro que mu hermano y yo estamos sanos y salvos, pero estoy completamente desconsolada, tratando de encontrar las palabras correctas", ha señalado, en otro comunicado remitido al portal 'TMZ'. "Han sido 24 horas muy traumáticas. Todo el día de ayer fui bombardeada con interminables llamadas de teléfono desgarradoras, llenas de lágrimas, de seres queridos mientras intentaba arreglar este lío", ha añadido.
Ahora bien, ¿qué ha pasado? Lil Tay asegura que su cuenta de Instagram fue 'hackeada' por una tercera persona, que difundió una "información errónea" sobre su muerte y la de su hermano, hasta el punto, sostiene, de que incluso su "nombre" era "incorrecto": "Mi nombre legal es Tay Tian, no 'Claire Hope'" —la menor rechaza a su padre y tutor legal, Chris Hope, que le da su apellido real—. Lo que todavía no ha explicado es por qué ha tardado 24 horas en desmentir su muerte. No obstante, en el pasado, algunos de sus antiguos representantes ya hablaron de los límites que estaba excediendo el equipo de la 'influencer' a la hora de hacer marketing.
Lo primero: nadie confirmó su muerte
Cuando salió la noticia, hubo varias circunstancias que hacían esta supuesta muerte un acontecimiento, cuando menos, extraño. Al ver la publicación inicial desde las redes sociales de Lil Tay donde se hablaba de su muerte y la de su hermano, la revista 'People' contactó con el departamento de Policía y con los médicos forenses del condado de Los Angeles, que ya aseguraron que no había registro de dicha muerte. Incluso el padre de la joven, Christopher Hope, llegó a decir que no tenía "ningún comentario" al respecto, en respuesta a la misma revista. El que fuera mánager de la pequeña, Henry Tsang, también se negó a confirmar la muerte tanto de Claire como la de su hermano. "He estado en comunicación con personas que tienen un conocimiento muy cercano con la situación de la familia", aseguró Tsang a 'The Daily Beast'.
"Dada la complejidad de las circunstancias actuales, estoy en el punto en el que no puedo confirmar ni desmentir la legitimidad del comunicado emitido por la familia", añadió. Tampoco la persona que supuestamente gestiona las redes de Lil Tay, Duane Laventure, comentó nada al respecto, a petición expresa de su madre. El contacto legal que figuraba cuando se presentó una solicitud para presentar Lil Tay como marca registrada, K. Saphhire, también se negó a hablar. El departamento de Policía de Vancouver, donde se creía que vivía Lil Tay desde 2021, tampoco tiene ningún registro de su muerte.
'New York Post' también puso en contacto con los responsables de la joven, pero no obtuvieron respuesta. Al llamar la revista al despacho de abogados Lindsay LLP (Vancouver) en el que trabaja el padre, Chris Hope, alguien que aseguró que era el propio Hope respondió para decir que no podía confirmar nada. "Sí, estás hablando con la persona adecuada, pero no tengo ningún comentario en este momento. No puedo decirte nada. Lo siento, no puedo", aseguraba. "De verdad que no puedo comentar nada ni ayudar en nada. Voy a colgar". El 'NYP' no pudo tampoco ponerse en contacto con Angie, la madre de Lil Tay.
¿Quién es Lil Tay?
Lil Tay se dio a conocer en las redes sociales en 2018, cuando sólo tenía nueve años, y compartía vídeos de sí misma con montones de dinero, rapeando y fardando de un estilo de vida a todo tren. Nacida en Canadá, en junio de 2018 publicó una serie de comentarios en su perfil —que ahora han desaparecido— en los que denunciaba directamente a su padre. En un vídeo (3 de junio), se la podía ver llorando explicando que quedaba bajo la custodia de su padre, quien la había obligado a abandonar las redes sociales.
En otro post, Lil Tay aseguraba que tenía planeado un viaje a Florida para encontrarse con el rapero XXXTentation, asesinado días después, tal y como recogió entonces 'Complex'. "Dado que Christopher John Hope no permitió que Tay fuera a Florida, en lugar de ir al aeropuerto a recogerla a ella y a su madre, decidió ir al concesionario de motos" de Deerfield Beach, donde fue asesinado a tiros por dos hombres con el rostro tapado.
De hecho, una de sus últimas publicaciones (esta sin eliminar) muestra una captura de pantalla de una supuesta videollamada entre ella y el rapero con un mensaje dirigido a XXXTentation: "Me cambiaste de verdad. Estuviste ahí para mí cuando todos querían que fallara; estuviste para darme consejos. Estuviste ahí", escribió. "Como figura paterna, al no tener una, haciéndome FaceTime y llamándome durante horas cuando estaba deprimida", añadía. "Hace tres horas anunciaste un evento que íbamos a realizar, teníamos todo listo y ahora, no puedo creerlo, la maldad en el mundo. Esto no es un buen adiós" [en juego de palabras utilizando la palabra adiós en inglés, 'goodbye', que literalmente significa 'buen adiós'].
Otra publicación, también eliminada, aseguraba que el padre de Lil Tay estaba intentando entregar a la niña en un hogar de acogida, que detuvieran a su madre y cerrar por completo su perfil de Instagram. Tal y como publicó entonces 'The Blast', el padre de Lil Tay denunciaba que el hermano de la menor, Jason Tian, se había hecho con el control de las redes sociales de Lil Tay y que desde ellas había proferido "amenazas de muerte", también contra su propio padre. Cuando tenía 9 años, Lil Tay fue entrevistada en 'Good Morning America', de ABC News. "La gente piensa que es divertido, supongo que porque tengo 9 años y ya he conseguido mucho", aseguraba. "Puedo hacer lo que quiera. Si no me creen, me da igual", decía.
La pequeña se había mudado recientemente de Canadá a Hollywood con su madre, Angie, quien afirmaba entonces sentirse "orgullosa" de su hija, a la que definía como una niña bien educada, de buen comportamiento y buenas notas, a la que le gustaba patinar, el piano y el ballet. Y sobre sus redes sociales, quitaba hierro: "Sólo entretiene a la gente". En aquella época, el rapero Snoop Dogg llegó a publicar un vídeo con el siguiente comentario: "He encontrado este vídeo de Lil Tay siendo entrenada por su hermano sobre cómo ser más ignorante. Ella tiene que estar en la escuela, aprendiendo a ser una niña pequeña, no una persona adulta estúpida", afirmaba.
Las denuncias contra el padre de Lil Tay
En su momento de estrellato en las redes sociales, aparecieron una serie de denuncias contra la familia de Lil Tay por estar abusando de su éxito y de sacando rendimiento económico con ella. Sin embargo, desde el entorno de Lil Tay las denuncias se fueron directamente al padre: en 2021, a través de la plataforma GoFundMe aparecieron una serie de acusaciones contra el padre de Lil Tay, presentadas por el hermano mayor de la 'influencer', Jason Tian, que lanzó una campaña de recaudación de fondos para "salvar" a su hermana. "Tay necesita desesperadamente dinero para apoyar su lucha contra un padre abusivo", apunta, al que responsabiliza del "estado de depresión" en el que vivía, sostiene, la familia. Lo define como un "padre ausente" que, con su anterior esposa (Hanee Hope), abusó "física y mentalmente" de Lil Tay.
"Mi hermana ha estado callada en las redes sociales durante los últimos tres años porque su padre ausente le entregó a mi madre una orden judicial exigiendo control sobre el dinero, la carrera y la custodia de Tay", explica, razón por la cual tuvo que regresar a Vancouver. "Le ha robado millones de dólares a mi hermana y se ha apoderado de todos sus fondos", denuncia, señalando que habría utilizado el dinero de Lil Tay para comprarse "una mansión, una lancha, buenos coches, spas, viajes a Egipto, Dubái, México, Filipinas, Hawái o Reino Unido, ropa de diseño y joyas y relojes".
Jason Tian acusa a Hope de haber mantenido un "hogar disfuncional", de llevar a casa a "muchos tipos de mujeres asiáticas", únicamente parejas sexuales, que llegaron a "desnudarse y dormir en la misma cama de Tay". En su campaña, el hermano de Lil Tay denuncia que el padre le daba a su hija "comida mohosa, con gusanos y parásitos" como almuerzo para el colegio e incluso la enviaba a la escuela con "los calcetines rotos". En una extensa y detallada denuncia, Jason Tian denuncia los insultos de Chris Hope a la madre de Tay, sus comportamientos inapropiados...
Tanto el entonces mánager de Lil Tay, Tsang, como otra fuente anónima aseguraron a 'The Daily Beast' por aquel entonces que todas estas acusaciones eran inventadas, y que formaban parte de una campaña de los representantes de la joven para convertir el escándalo en fama. "Christopher Hope no quiere el dinero de Lil Tay", explicó entonces Tsang al medio. "Sólo hay tres cosas que quiere ver: no más vídeos locos de Tay; un 25% de las ganancias a un fondo fiduciario para Tay y una cierta estructura en su imagen pública", afirmaba. Tsang confirmó entonces que la Justicia había entregado la custodia completa de la niña al padre, y que habían frustrado un intento por denunciar al padre de agresión sexual. Otro presunto representante de Lil Tay, Chris Jones, dijo a 'The Verge' que todas estas difamaciones eran mentira.
Fue en aquella época cuando la madre y el hermano de Claire (Lil Tay) fueron señalados por estar explotando la figura de la niña, siendo acusados de obligar a la menor a crear contenido continuamente para ganar dinero y de asesorarla para generar polémica y, por lo tanto, atraer más atención. En la entrevista con 'Good Morning America', la propia niña aseguró que "nadie" la estaba obligando a hacer nada y negó que su madre quisiera "ganar dinero" con ella. "Estoy feliz con lo que hago", aseguraba, quitando importancia a las consecuencias futuras de su contenido con solo nueve años, y acerca de los comentarios de los 'trolls' en Internet, afirmaba "no leerlos", para "no perder tiempo" con gente a la que no agradaba. "Todos los que la odian quieren llamar su atención, porque es famosa y tiene una pasión, una pasión y un sueño", añadía su madre.