Miguel del Arco estrenó el 20 de mayo en la Zarzuela ¡Cómo está Madriz!, un musical con Paco León como "pegamento" que, desde entonces, provoca que "unos 50" espectadores, de los mil que lo llenan cada día, reclamen. Hasta que, en la última presentación unos "energúmenos" reventaron la función.
"Acepto la disensión, la discrepancia y, no hace falta decirlo, la libertad de expresión, pero lo de anoche fue otra cosa: una falta de respeto absoluta a los usos democráticos", ha asegurado el director de la obra.
La obra, que fusiona dos zarzuelas y que hace crítica social y política muy relacionada con la actualidad española, incluye, por ejemplo, la jota de Los Ratas a la vez que se proyectan fotografías de Luis Bárcenas o Miguel Bernad.
Del Arco estaba fuera de Madrid pero la compañía le ha contado que en un momento en el que escenario no ocurría nada con "excesiva controversia", un grupo de doce que ocupaba la misma fila en el patio de butacas empezó a gritar y a insultar a los actores" con el propósito claro de reventar la función y que se parara".
Otro sector del público afeó entonces a los alborotadores su comportamiento, pero "lejos de calmarse, se crecieron y, entonces, Paco León desde el escenario explicó que así no podían continuar y les pidió que se marchasen".
Los discrepantes se fueron no sin antes "pegarse unos cuantos agarrones entre ellos". Tras un par de minutos de "recolocación", la función pudo seguir y terminó "en un delirio" de baile y aplausos.