Desplieguen las banderas (europeas) y abran bien los oídos porque, señoras, señores, el 21 de junio se celebra el Día Europeo de la Música. Un día después del solsticio de verano, con el fin de las clases y las vacaciones a la vuelta de la esquina, decenas de ciudades españolas empiezan las celebraciones por esta jornada, con conciertos y actividades gratuitas por diferentes lugares. Madrid es una de ellas: el Día de la Música en la capital española se celebra con conciertos gratis por espacios como Matadero o el Retiro, o exposiciones sobre grandes figuras de la música.
Se trata de una jornada que busca reivindicar y promocionar la música como lenguaje universal de la humanidad, aunque lo cierto es que se celebra únicamente en Europa, porque en otros países... también, pero en otra fecha. Para saber por qué el 21 de junio se celebra el Día Europeo de la Música hay que retroceder hasta el año 1976, cuando el músico Joël Cohen, quien fue asistente del director de France Musique, propuso celebrar las 'Saturnales de la Música' dos días al año, como una especie de solsticios musicales: los días 21 de junio y 21 de diciembre.
Las Saturnales fueron unas festividades romanas que se llevaban a cabo con sacrificios en lugares como el Templo de Saturno o el Foro Romano, a las que seguían banquetes públicos, intercambio de regalos y una especie de carnaval que, según el poeta Catulo, podría considerarse "el mejor de los días". La primera 'saturnal musical' que se celebró en el marco de estos Días Europeos de la Música fue el 21 de junio de aquel año, cuando bandas y músicos salieron a las calles de Toulouse (Francia) a celebrar la música.
Unos años más tarde, una encuesta realizada en Francia en 1982 reveló entonces que cinco millones de ciudadanos tocaban algún instrumento musical. Fue entonces cuando el ministro francés de Cultura, Jack Lang, lanzó la primera edición oficial de la Fiesta de la Música, de la mano del compositor Maurice Fleuret y del escenógrafo Christian Dupavillon, arquitecto-escenógrafo.
A esta Fête de la Musique invitaron a músicos, profesionales y amateur, a tocar de forma gratuita sus instrumentos en espacios públicos, con la intención de hacer que la música fuera accesible para todo el mundo. Y ahí nació el germen del Día Europeo de la Música: en 1985, el Año Europeo de la Música, la Unión Europea estableció este día de saturnalia veraniega como el Día Europeo de la Música bajo esta misma filosofía: promover la diversidad musical, animar a los músicos a compartir su trabajo y a fomentar y facilitar el intercambio cultural a través de la música.
¿Y el Día Internacional de la Música?
No obstante, si haces una búsqueda rápida en Internet verás que el Día Internacional de la Música no es el 21 de junio. Detrás de cada jornada de celebración está una organización diferente. Y como ocurre con muchos 'días de', puede que haya varios al año. Existe un Día Internacional de la Música, impulsado por el violinista y director de orquesta Yehudi Menuhin, quien en 1997 recibió el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia (ahora, Princesa de Asturias).
Fue en 1975 cuando el artista, desde el Consejo Internacional de Música (IMC), creado en 1949 por la UNESCO, trató de impulsar la celebración internacional de un día para la música, con el fin de promover el arte musical entre todos los sectores de la sociedad, pero también de aplicar los ideales de paz y amistad entre pueblos de la UNESCO, la evolución de sus culturas e intercambio de experiencia.
El primer Día Internacional de la Música, organizado por el IMC, tuvo lugar el 1 de octubre de 1975, y desde entonces, se añade a los calendarios musicales el primer día del décimo mes.
El 22 de noviembre, Día del Músico (por error)
Y al mes siguiente, otro día para festejar la música. Algunos países, como Argentina, optan por el 22 de noviembre para celebrar su Día de la Música, pero este homenaje tiene un sentido más religioso que artístico. Y, en la mayor parte de lugares donde se celebra, se dedica a los músicos más que a la música en general. ¿Por qué? Porque según el santoral católico, el 22 de noviembre es Santa Cecilia de Roma, patrona de los músicos.
Santa Cecilia de Roma es una de las santas más conocidas y veneradas de la historia, una mártir a la que se la recuerda en prácticamente cualquier punto de mundo. La Iglesia católica incluyó en el santoral católico el 22 de noviembre en su honor al ser la fecha en la que fue martirizada, tras ser torturada introducida en unas termas de agua hirviendo por haberse convertido al cristianismo. En el año 1594, el papa Gregorio XIII la nombró patrona de la música aunque, según la información recogida por 'Música Antigua' y el Ministerio de Cultura argentino, su declaración como patrona de los músicos pudo deberse a un error de traducción.
Jesús Ignacio Pérez-Perazzo, director de orquesta y profesor de Historia de la Música venezolano, asegura que un hecho de que se relacione a Santa Cecilia de Roma con la música pudo ser que en su infancia se cree que pudo tocar algún instrumento musical, como la lira o el arpa, pero la razón principal está en las actas que recogen el martirio de la ahora santa.
"Candéntibus órganis Cæcilia Dómino decantábat dicens..." rezan las actas, lo que quiere decir "Mientras el horno estaba al rojo vivo, Cecilia cantaba al Señor diciendo...". La hipótesis de Pérez-Perazzo es que en algún momento, la persona que realizó la transcripción de las actas tradujo la palabra "órgano" por el instrumento musical homónimo, cuando realmente parecía hacer referencia al fuelle que se usaba para avivar las llamas.
Autora de 'La huella vikinga'
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En La huella vikinga, la divulgadora explica de dónde viene la influencia nórdica que existe en nuestra cultura y destierra las falsas interpretaciones que se hacen de ella.