Bajo la calle Cascalerías de León se esconde todo un tesoro con más de dos mil años de historia. Estas ruinas que forman parte del antiguo anfiteatro romano.
Se descubrieron hace 20 años. Y se habilitaron para disfrute del público.
Mejor suerte que la que corrió esta otra parte del anfiteatro, la primera que se encontró en 1994. Jamás se ha podido visitar. De hecho hay vecinos que ni siquiera sabían que estaban allí y se han enterado ahora porque su dueño lo vendía como trastero por 25.000 euros.
En la calle hay quien apunta a que debería ser el Ayuntamiento quien se hiciera cargo. Para protegerlo tendría que haber llegado a un aucerdo con el propietario.
En el Ayuntamiento confirman que ese acuerdo no llegó y advierten de que quien lo adquiera ahora tendrá que respetar las ruinas.
Por lo tanto, una de las posibles soluciones sería que el propio Ayuntamiento comprara las ruinas. Dice el arqueólogo municipal que "25.000 euros no son nada para una administración".
De momento el dueño, ya ha retirado el anuncio.