El Baskonia sacó una casi obligada victoria (91-92) en la pista del Unics Kazán ruso, penúltimo clasificado de la Euroliga, aunque lo tuvo que hacer en el último suspiro tras un partido donde Shane Larkin y Toko Shengelia resistieron la exhibición de Keith Langford y Quino Colom.
El equipo vasco volvió a mostrar su irregular cara lejos del Buesa Arena y cerca estuvo de encadenar otro revés como visitante en el torneo continental, agravado por ser ante uno de los rivales teóricamente más accesibles, pero salió airoso gracias al base estadounidense y el ala-pívot georgiano.
Ambos se combinaron para hacer 41 puntos y frenar a Langford y Colom, que sumaron 51, 28 del escolta y 23 del español, y que amenazaron en el cuarto final con endosar la derrota a los baskonistas en un trepidante final donde Larkin y Langford intercambiaron triples que parecían ganadores y donde Shengelia dio el triunfo por su buena mano desde el tiro libre.
El partido estuvo marcado en su primer acto por los continuos parciales. Baskonia comenzó dominando, pero recibió, liderado por Quino Colom, un 12-0 que dio la vuelta al marcador antes de recomponerse y firmar un buen final de primer parcial, gracias al rebote ofensivo y a tres pérdidas consecutivas de su rival.
Las buenas sensaciones del final de este periodo se alargaron en el comienzo del segundo y los de Sito Alonso, al ritmo de Shane Larkin, encadenaron entre un parcial y otro un demoledor 0-14 que les puso cómodamente por delante en el electrónico (20-14). El acierto desde el triple de Chase Budinger, con dos consecutivos, amplió la renta visitante (22-35) antes que el Unics fuese el que reaccionase. El Baskonia se estancó, Langford logró aparecer y el conjunto de Kazán se volvió a meter en el partido con un 9-0, aunque el equipo vitoriano alcanzó el descanso mínimamente por delante (40-43).
Colom y Langford se unieron para complicarle el partido al Baskonia
Las cosas tras la reanudación no trajeron buenas noticias para el conjunto baskonista. Los locales empezaron finos desde fuera, con tres triples, y Larkin se vio con problema de faltas, aunque permaneció en la pista en el momento de mayor igualdad con intercambio desde más allá de la línea de tres.
Los parciales a favor de uno u otro terminaron por desaparecer y el encuentro se movió en marcadores cortos. La fortaleza en el rebote ofensivo y el acierto exterior eran las claves del Baskonia, amenazado por el crecimiento en protagonismo según pasaban los minutos de Keith Langford.
El periodo más ofensivo (27-24) dejó todo igualado para los diez minutos finales en el Basket Hall. Quino Colom apareció para tomar las riendas y con once puntos seguidos puso a los de Evgeny Pashutin por delante en el partido a falta de menos cuatro minutos (83-77).
Entonces surgieron Larkin y Shengelia, que se unieron para anotar 13 de los últimos 15 puntos de los suyos, con el georgiano anotando ocho tiros libres sin fallo. El base metió un triple que sabía casi a victoria a falta de siete segundos (88-90), pero Langford encontró espacio para replicar (91-90) antes de que Shengelia mantuviese la calma para dar la victoria pese a que el máximo anotador del torneo aún tuvo otro triple para haber dado a su rival un buen disgusto.