El Baskonia sumó otro tropiezo a domicilio en la Euroliga al perder por un claro 98-89 ante el Darussafaka turco, en un partido donde los de Sito Alonso no encontraron su habitual baloncesto alegre ni opusieron su física resistencia defensiva.
Después de dos triunfos seguidos en el Buesa Arena, el equipo vitoriano volvió a sufrir lejos de su pabellón y no pudo dominar a un rival al que había arrollado en Vitoria (73-52), pero que se tomó la revancha de esa derrota aprovechando la mala noche baskonista.
Sólo Adam Hanga (19 puntos) estuvo cerca de su nivel en un conjunto donde Shane Larkin estuvo lejos de sus números ante un oponente que contó con un estelar Dairis Bertans (29), apoyado por Brad Wanamaker (21) y Scottie Wilbekin (17) y por un gran acierto triplista (14/22). La defensa no funcionó en el segundo y tercer cuarto, y el rebote, uno de los puntos fuertes, tampoco ayudó (35 a 27).
El comienzo del partido estuvo marcado por los errores en ataque, sobre todo de los locales, a los que les costaba ver el aro. Los de Sito Alonso, poco a poco y de la mano de Hanga (7 puntos), sacaron partido a esta situación y abrieron la primera brecha en el marcador (6-17).
David Blatt logró corregir este inicio y un atasco ofensivo visitante le permitió meterse en el partido antes de que el daño fuese mayor con un 7-0 de parcial (13-17). Baskonia se recompuso para volver a escaparse antes de que Bertans, con un'3+1', y el intercambio de triples lo dejase todo igualado al final del primer cuarto (20-24).
El Darussafaka, con el trabajo de Bertans y Wilbekin, firmó un 10-0 para recuperar la iniciativa (27-24) en un momento el que Alonso había puesto en pista a Bargnani, probando de nuevo al italiano como la pasada semana pero que no aportó nada en los tres minutos que estuvo, salvo dos faltas en menos de un minuto. El conjunto baskonista tampoco encontraba los puntos de Larkin, aunque el base, a cambio, repartía asistencias (6).
El equipo turco, con la aparición de Wanamaker (13 puntos, 8 en este parcial), era ahora el que dominaba y aprovechaba el bajón defensivo de su rival, que permitió 27 puntos en este cuarto. El acierto en el triple vitoriano, con cinco en estos diez minutos, mantuvo al Baskonia con las opciones intactas al descanso (47-46).
Una defensa desaparecida
Wilbekin tomó las riendas de los suyos tras la reanudación y con dos triples consecutivos lideró al conjunto local, que intentaba despegarse mediado el tercer cuarto (56-51), pero que se topaba con la resistencia de los visitantes, que impedían que la brecha pudiese agrandarse de nuevo gracias a los triples.
Sin embargo, la nueva aparición de Bertans, con ocho puntos casi seguidos, llevaron a los de Blatt a meter miedo por primera vez (67-59). El Baskonia, el mejor reboteador de la Euroliga, era dominado en esa faceta por uno de los peores equipos, y un nuevo triple local (Wanamaker) le dejaba en situación complicada a falta de diez minutos (77-68).
Los de Sito Alonso tenían claro que mejorar defensivamente era la primera premisa para tener opciones y en eso se afanaron, pero el Darussafaka también intentó hacerse fuerte atrás y gracias a los tiros libres superó por fin la decena de ventaja (86-74).
El conjunto baskonista no encontraba el aro rival y veía como el partido se le iba, incapaz de frenar su sangría en el rebote y tampoco acertado en los tiros libres para recuperar opciones. Un triple de Bertans terminó por finquitarlas y sentenciar un nuevo revés a domicilio.
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