El delantero del FC Barcelona Ousmane Dembélé ha advertido del peligro de confiarse del 4-1 cosechado en la ida de los cuartos de final de la Champions ante la Roma y ha asegurado que "la eliminatoria no está acabada" y que todavía deben ir al "legendario" Olímpico de la capital italiana para intentar resolverla.
"La Roma es un buen equipo y la eliminatoria no está acabada. Tengo muchas ganas de jugar en Roma, es un estadio legendario en Italia y siempre es especial jugar en estadios así", indicó en una entrevista concedida a los medios oficiales de la UEFA.
Además, el ariete francés explicó que están emocionados con la Champions, una competición que será dura y en la que tendrán que afrontar grandes escollos si superan los cuartos. "La Champions no será fácil, hay equipos muy preparados, los cuartos de final y las semifinales son decisivos y haremos todo lo posible para conquistar el título", subrayó.
Por otra parte, Dembélé recordó los momentos previos a su fichaje por el club azulgrana. "Todo el mundo hubiera querido estar en mi posición, ningún jugador diría que no a fichar por el Barcelona, es el mejor equipo del mundo. "No lo he encontrado difícil, yo me concentro en jugar al fútbol y no siento ningún tipo de presión", añadió.
El galo también elogió a su compañero Leo Messi, y confesó que tenía un póster suyo en la pared durante su infancia. "Es impresionante jugar junto a Messi, para mí es un placer poder compartir vestuario con este tipo de jugadores que lo han ganado todo", manifestó.
Por último, tuvo buenas palabras para el técnico culé, Ernesto Valverde. "Es un entrenador tranquilo, le gusta hablar con los jugadores, darles consejos, ayudarles, es muy bueno haciendo su trabajo", concluyó.