Las jugadoras y el cuerpo técnico del Juventud Rondilla de Valladolid denuncian el mal trato que recibieron por parte de los árbitros en el pasado encuentro ante el Sporting Garrido. Aseguran que los colegiados dijeron cosas como "jodeos, guarras, a mamarla".

Afirman que todo era más o menos normal hasta que las rivales les hicieron el 2-1, cuando el asistente comenzó con los insultos. A esto se sumó el árbitro principal cada vez que les señalaba una falta en contra.

Las jugadoras del Rondilla no daban crédito y, hartas de insultos, fueron a pedir explicaciones al colegiado al término del encuentro. No hay nada reflejado en el acta y el club ha decidido quejarse de manera formal a la Federación de Fútbol de Castilla y León.

Por otra parte está el conjunto rival, el Sporting Garrido, que asegura que no escuchó ningún insulto durante el partido y ha remitido un vídeo del mismo al Comité de Competición para que lo estudie.

laSexta ha intentando sin éxito contactar con el árbitro y su asistente para conocer su versión, pero no ha habido respuesta. El sindicato arbitral pide prudencia y respeto a la presunción de inocencia hasta recabar todas las pruebas.