El Atlético de Madrid sigue sin saber lo que es ganar al Girona. Como ya había sucedido en los tres enfrentamientos previos entre ambos equipos, este miércoles el cuadro colchonero tampoco pudo pasar del empate (1-1) en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey, que le enfrentó al incansable conjunto de Eusebio Sacristán.
Antoine Griezmann avanzó a los madrileños en el minuto 8, pero el 'Choco' Lozano volvió a equilibrar en el marcador a la media hora de juego, manteniendo vivo el sueño del Girona de clasificarse por primera vez para los cuartos de final del torneo del KO.
La iniciativa del encuentro recayó, en los primeros compases, en las botas de los discípulos de un Diego Pablo Simeone que, con el objetivo de dejar encarrilada la séptima clasificación consecutiva para cuartos, alineó a la mayoría de sus futbolistas titulares.
El Girona, sin embargo, pudo adelantarse en el minuto 7 por mediación del 'Choco' Lozano, pero, después de combinar con Aleix García, el delantero hondureño perdonó al disparar tímidamente a las manos de Antonio Adán a pesar de tenerlo todo de cara para firmar el 1 a 0.
El primer tanto del partido llegó en la siguiente jugada, cuando Antonie Griezmann batió a Gorka Iraizoz con un disparo potente e imparable que entró por la escuadra.
El 0-1 despertó al cuadro local, que volvió a acercarse a las inmediaciones de Adán por mediación de Lozano y Seydou Doumbia.
El Girona, que se presentó en la elite del balompié español en un inolvidable encuentro contra el Atlético de Madrid, no había perdido ninguno de los tres encuentros que habían disputado contra el conjunto colchonero desde aquel feliz 19 de agosto del 2017, y este miércoles demostró el por qué por enésima vez.
Con su fútbol aguerrido e intenso, los pupilos de Eusebio encerraron al Atlético en su área hasta que en, el minuto 33, el 'Choco' sorprendió a Adán desde la frontal del área para restablecer el empate.
Ni siquiera la presencia en el once titular de cinco de los futbolistas que menos han entrado en los planes del técnico vallisoletano en esta primera parte del curso (Gorka Iraizoz, Pedro Alcalá, Marc Muniesa, el 'Choco' y Doumbia) y de dos jugadores del Peralada-Girona B (Valery Fernández y el debutante Seung-Ho Paik) alteró demasiado el carácter de un Girona que en los últimos minutos de la primera mitad encerró al Atlético de Madrid en su propio campo.
La segunda mitad empezó igual que la primera, con el Atlético acercándose con peligro al área local. Nikola Kalinic, Ángel Correa, que en el descanso sustituyó al joven Francisco Montero, Vitolo y Thomas Partey pudieron decantar el encuentro a favor del cuadro colchonero, aunque la ocasión más clara la protagonizó un Doumbia que, poco antes de que se cumpliera la hora de juego, malbarató la oportunidad manifiesta de gol que le brindó Jonás Ramalho.
El partido terminó en tablas y la eliminatoria se decidirá en el Wanda Metropolitano.