El amor puede aflorar en cualquier lugar. Por ejemplo, en un campo de fútbol. Fue en un estadio donde se conocieron Magdalena Eriksson y Pernille Harder en su camino hacia el Mundial de 2019, en un partido que enfrentaba a Suecia contra Dinamarca. Allí se vieron, y desde ese momento se han convertido en pareja para protagonizar, finalmente, el beso de Francia.
Fue en el duelo que enfrentó a la selección sueca de Eriksson contra Canadá. Allí estaba Harder para animar a su novia vestida con los colores de Suecia. Una vez concluido el envite, ambas se fundieron en un emotivo beso.